El primer ministro, Ehud Olmert, negó hoy haber prometido al gobierno de Siria un retiro israelí de los Altos del Golán hasta las fronteras del 4 de junio de 1967,  como parte de la negociación anunciada esta mañana bajo la mediación de Turquía.
Tan sólo horas después de que la oficina del primer ministro israelí anunciara que había comenzado conversaciones de paz indirectas con Siria, el gobierno hebreo tuvo que emitir un nuevo comunicado para rechazar lo reclamado por el ministro de Asuntos Exteriores sirio Walid Al Mouallem, quien dijo, en Damasco, que Israel había expresado su buena voluntad de ceder Altos del Golán.
 "Como (el primer ministro Ehud) Olmert ha dicho en el pasado, Siria conoce lo que Israel demanda de ella e Israel sabe lo que Siria espera que haga", dijeron voceros del premier.
Desde la oficina de Olmert se remarcó que "el anuncio formal que fue emitido hoy por Damasco, Ankara y Jerusalén, no menciona (la situación de) el Golán y esto no es sin razón".
El primer ministro israelí advirtió, además, que "las negociaciones no serán fáciles: No será simple, y es posible que tarde mucho" en llegar a un acuerdo, manifestó.
No obstante, Olmert se mostró confiado en que "tarde o temprano" se alcanzará la paz, aunque advirtió que el costo del acuerdo "puede implicar concesiones difíciles".
También dijo que el anuncio de este acuerdo "constituye el final de una fase en un proceso que ha durado más de un año".
 Por otra parte, Israel y Siria manifestaron su intención de llevar a cabo las negociaciones "de buena fe" y "abiertamente" a fin de lograr una "paz completa" y agradecieron a Turquía, que mantiene buenos lazos con ambas naciones, por su ayuda y "generosa hospitalidad", según informó la prensa israelí.
"Ambas partes han iniciado negociaciones indirectas con el auspicio de Turquía", manifestó la Oficina del Primer Ministro en su comunicado.
Y agregó: "Las partes han declarado su intención de llevar a cabo las negociaciones abiertamente. Han determinado dialogar de manera seria y continua con el objetivo de lograr una paz completa".
Por su parte, la cancillería de Siria expresó casi en idénticos términos: "Siria ha iniciado negociaciones indirectas con Israel con el auspicio de Turquía. Ambas partes han expresado su deseo de llevar a cabo negociaciones de buena fe y decidieron continuar el diálogo con seriedad a fin de lograr una paz completa de conformidad con el marco establecido en la Conferencia de Madrid (de 1991)".
La reapertura de las negociaciones no sólo generó entredichos entre ambos gobiernos sino que además avivó el reclamo del comité de comunidades de los Altos del Golán, que convocó a una sesión de emergencia ante la supuesta intención de Israel de hacer concesiones en futuras negociaciones con Siria.
Según el sitio Ynet, el presidente de Consejo del Golán Regional, Eli Malka, no dio su aval a las gestiones del primer ministro y apeló a que el knesset vaya a actuar "sanamente y sabiamente".
"Esta negociación es mala para Israel, mala para los Americanos, mala para el mundo árabe y mala para una futura paz", advirtió el funcionario.
Por su parte, Estados Unidos elogió  el rol de Turquía de mediar indirectamente en conversaciones de paz entre Siria e Israel, y negó haber estado involucrado en las negociaciones.
"Creo que Turquía jugó un rol bueno y útil en este aspecto," dijo el funcionario de alto rango del Departamento de Estado David Welch, al opinar sobre las conversaciones.
   
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