El Centro Simon Wiesenthal calificó como un escándalo el anuncio de la selección de dos ciudadanos iraníes sospechados de haber participado en el atentado a la AMIA como candidatos para las próximas elecciones presidenciales, según lo aprobado por el Líder Supremo, Ayatollah Khamenei.

“La selección de dos sospechosos por el ataque contra la AMIA como candidatos presidenciales define una continuidad en la política antisemita iraní y en su programa nuclear”, expresó el Centro Wiesenthal a través de un comunicado firmado por el director de Relaciones Internacionales, Shimon Samuels, y el representante en América Latina, Sergio Widder.

Mohsen Rezai y Ali Akbar Velayati, ambos acusados por el fiscal argentino Alberto Nisman por su presunta complicidad en el ataque terrorista, se presentarán en las elecciones previstas para 14 de junio.

Esto ocurre a la vez que el actual presidente, Mahmoud Ahmadinejad, aprueba el memorándum de entendimiento firmado por Argentina e Irán para crear una “Comisión de la Verdad” para revisar lo realizado judicialmente por Nisman.

El acuerdo fue aprobado por el Congreso argentino, en tanto que su contraparte iraní, de manera elocuente, demoró su consideración y forzó a Ahmadinejad a “aprobarlo” sin apoyo parlamentario.

“La selección de dos candidatos presidenciales implicados en el mayor pogromo de la diáspora desde el Holocausto define una continuidad en la política antisemita iraní y en su programa nuclear. El acuerdo argentino-iraní se ha vuelto irrelevante; de hecho, es una farsa, y urgimos al canciller argentino, Héctor Timerman, a que lo anule de inmediato”, manifestó Shimon Samuels.

“En tanto es evidente que Irán no tiene interés en la transparencia ni en una verdadera cooperación, hacemos un llamamiento para que se avance contra los sospechosos y contra quienes están acusados de casi dos décadas de encubrimiento. No puede haber pretextos para nuevas dilaciones”, agregó Sergio Widder.

“El anuncio iraní de dos candidaturas presidenciales de acusados como cómplices del ataque contra la AMIA constituye una burla hacia la memoria de las víctimas y hacia la República Argentina”, concluyeron los directivos del Centro.

GB