El presidente de la DAIA, Julio Schlosser, lamentó hoy miércoles que el mundo no haya tomado medidas de precaución tras el atentado a la Embajada de Israel en la Argentina, ocurrido en marzo de 1992 y que marcó el comienzo de una ola de ataques de parte del terrorismo internacional.

“El mundo empezó a entender lo que es el terrorismo internacional a partir de los atentados a las Torres Gemelas (Estados Unidos), al tren de Atocha (España) y el subte de Londres”, indicó Schlosser en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN).

Para el titular del brazo político de la comunidad judía argentina, los atentados a la AMIA, perpetrado en 1994, y a la Embajada de Israel, en 1992, ocurrieron “muy lejos” para gran parte del mundo y además “la mayor parte de las víctimas fueron de la comunidad judía, entonces, se pasó por alto”.

“Está claro que a partir del punto de inflexión que fueron las Torres Gemelas, Atocha, y Londres se entendió cuál era el enemigo actual y todas las medidas que se adoptaron desde entonces. Hoy viajamos en un avión y solo faltan que nos desnuden, mientras que después del atentado a la AMIA seguíamos comiendo con cuchillo de acero y el control era mínimo”, señaló el dirigente.

A poco de cumplirse 21 años del atentado a la Embajada de Israel en Buenos Aires, Schlosser expresó que “el 17 de marzo es una fecha muy cara” para los sentimientos de la comunidad judía argentina.

“Por lo tanto, nos solidarizamos con todas las víctimas de este atentado y seguimos con nuestro reclamo de justicia para las víctimas de la AMIA y la Embajada de Israel frente a ese flagelo que viene a atentar contra la humanidad que es el terrorismo internacional”, manifestó.

Schlosser remarcó que “la DAIA al ser una institución esencialmente sionista reafirma su compromiso con el Estado de Israel y con la comunidad judía argentina”.

A poco de aprobarse el memorándum que la Argentina firmó con Irán en relación a la causa AMIA y consultado respecto de la tarea de presidir la DAIA y representar a los familiares de las víctimas de los atentados, el dirigente aclaró que su tarea “es cumplir con un mandato, con una misión porque acá no es difícil ni fácil es una misión que hay cumplir”.

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