Estados Unidos aseguró que la organización libanesa Hezbollah intensificó su apoyo al gobierno sirio y se convirtió en parte de la "máquina de matar" del presidente Bashar Assad.

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La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Susan Rice, afirmó en la reunión mensual del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Medio Oriente que los líderes de Hezbollah también quieren trazar nuevas medidas con Irán para mantener a Assad en el poder.

Las declaraciones de Rice  y del embajador de Israel en la ONU, Ron Prosor, argumentaron que Hezbollah, que libró una guerra contra Israel en 2006 y es una importante fuerza política y militar en el Líbano, envió un número cada vez mayor de combatientes para ayudar al asediado régimen de Siria.

La minoría gobernante alauita de Siria es una rama del Islam chiíta y mantiene estrechos lazos con Irán y Hezbollah, que son de mayoría chiíta. Assad ayudó mucho a Irán, Hezbollah y Hamas, que controla la Franja de Gaza, para desestabilizar el Líbano y amenazar la seguridad de Israel y de los intereses estadounidenses en Oriente Medio.

La embajadora de Estados Unidos acusó al líder de Hezbolá, el jeque Hassan Nasrallah, de tener dos caras sobre sus afirmaciones cuando sostiene que está promoviendo los intereses del Líbano.

"Los líderes del grupo pueden tratar de cambiar el tema al invocar una retórica hueca sobre la llamada resistencia, pero la verdad está a la vista: los combatientes de Nasrallah ahora son parte de la máquina de matar de Assad y los líderes de Hezbollah siguen conspirando con Irán nuevas medidas para apuntalar a un dictador asesino y desesperado", dijo.

Rice sostuvo que Estados Unidos está alentando a la comunidad internacional "para contrarrestar las actividades terroristas de Hezbollah y para exponer la participación de Hezbollah en la guerra de Assad."

Prosor embajador de Israel, dijo que Nasrallah afirma que necesita un ejército privado con misiles avanzados para defender al Líbano contra el Estado hebreo.

"Hoy vemos que el ejército de Hezbollah está mucho más preocupado por descuartizar a sus hermanos y hermanas árabes en Siria", dijo Prosor.

Además consideró que Nasrallah y el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, formar un "trío del terror" con Assad ", ofreciendo al tirano de Damasco orientación sobre la manera de convertirse en el carnicero del pueblo sirio de la manera más eficiente".

La embajadora de Estados Unidos dijo que la guerra siria de 19 meses ahora plantea un desafío para todos los países vecinos de Medio Oriente, incluyendo Líbano, que sufrió los ataques transfronterizos y una afluencia de refugiados sirios, según informó la agencia AFP.

Asimismo elogió al gobierno libanés y a las fuerzas armadas "por mantener la estabilidad y el orden público en esta coyuntura crítica", y dio la bienvenida a los esfuerzos realizados por el presidente libanés Michel Suleiman para promover el diálogo en particular sobre el desarme de las milicias ilegales como exige el Consejo de Seguridad de la ONU.

Muchos oradores en la reunión del consejo se refirieron al aumento del número de víctimas en Siria -ahora estimado por los activistas en más de 30.000-, pero gran parte de la atención se centró en el conflicto que mantienen Israel y los palestinos.

El Jefe Político de la ONU, Jeffrey Feltman, dijo al consejo debería estar preocupado por el fracaso de Israel y los palestinos en tomar medidas significativas para reiniciar las estancadas negociaciones sobre cuestiones fundamentales para lograr el objetivo de dos Estados que vivan uno al lado del otro en paz, haciendo hincapié en que esto se debe siendo la máxima prioridad.