En diálogo con esta agencia, el diputado israelí de Kadima, Yoel Hasson, expresó que “Kadima está en la oposición porque así lo eligió. Después en la votación recibimos la mayoría, pero nos dimos cuenta que no podíamos formar gobierno, por lo tanto decidimos que lo mejor era estar en la oposición. Seremos luchadores activos y por sobre todas las cosas, responsables. Apoyaremos al gobierno si lo necesita, pero sin olvidar que somos una alternativa para el gobierno.”

Se mostró de acuerdo con la solución de dos estados para dos pueblos, pero con límites seguros y sin terrorismo palestino. Además llamó a crear una fuerza internacional para evitar que Irán tenga armas nucleares.

Consultado por la gestión del Primer Ministro, Hasson respondió a AJN que “hay que recordar que Netanyahu llega a ser premier por elección del parlamento y el acuerdo de partidos. No creo que haya habido una posición ideológica de la sociedad israelí. Por otra parte nosotros queremos un cambio en la forma de elección y es una propuesta que elevaremos. No pudimos tampoco hacer un gran gobierno de unidad nacional, fue una apuesta muy grande”.

En relación a ese tema, agregó que “el mayor desafío de Netanyahu será mantener a Israel como un estado judío, seguro y democrático. Además tenemos que dejar en claro que es “la casa nacional de los judíos”. Tenemos que asegurar que habrá una mayoría judía, con fronteras seguras. Para lograr la paz habrá que hacer concesiones dolorosas, espero que él entienda eso. También están los desafíos económicos por la crisis financiera mundial”.

En otro orden de temas, y consultado acerca de la solución de dos estados para dos pueblos, Hasson no dudó, “estoy de acuerdo, es la solución correcta, hasta para el interés israelí. Creo que esta idea otorga fronteras seguras y sabemos que el estado palestino no tendrá un ejército. Estos factores dejarán que el pueblo de Israel viva de manera ordenada y sin terrorismo; en paz. Yo apoyo el proyecto de tener nuestro país democrático y distinto del palestino, pero con la seguridad de una mayoría judía, ya que sin ella se perdería el sueño, la visión sionista”.

Sobre los dichos del canciller Liberman acerca de que Israel no está comprometida con los acuerdos de Annapolis, se mostró en desacuerdo. “Nosotros apoyamos los acuerdos de Annapolis, creemos como partido que hay que respetar lo que ya se firmó. De todas manera, soy cauto y quiero ver cómo se desarrollan los acontecimientos, que pasa en la realidad y no en las palabras”.

La amenaza iraní fue también tema de conversación. “El tema de Irán no es un problema privativo de Israel, sino de la comunidad internacional y hasta de Medio Oriente. La adquisición de armas atómicas debe preocupar al mundo libre ya que lo pone en el camino del mal. Hay que crear una coalición, una fuerza mundial fuerte y clara que asegure que no habrá armamento atómico en la región”.

 

Por último dejó sus deseos para los 61 años del Estado de Israel, festejado hace pocos días. “Nuestro país es el de todos los judíos, también de quienes viven en la diáspora, y todos tenemos que sentirnos orgullosos. En 61 años creamos uno de los países más modernos y avanzados del mundo. Nuestro gran aporte a la alta tecnología, la ciencia, la medicina, nos hace ser optimistas para el futuro”.

Hasson recalcó que el mayor desafío para todos es “mantener a Israel como la nación judía, la casa nacional de todo el pueblo, esa es nuestra consigna”.

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