Construir en todas partes en Jerusalem, incluyendo áreas sobre las líneas anteriores a 1967, es el mejor modo de responder a aquellos que niegan el derecho de Israel de existir, dijo el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ayer, según informó el medio israelí The Jerusalem Post.

 

“La respuesta real es continuar fortaleciendo al Estado de Israel, seguir construyendo en Jerusalem y seguir desarrollando allí – en todas partes – sin frenar”, dijo.

 

El primer ministro israelí habló anoche en una ceremonia especial en el Monte Ammunition para marcar los 47 años desde la reunificación de Jerusalem después de la Guerra de los Seis Días en 1967. Este fue uno de los cuatro emotivos discursos que dio en 24 horas, incluyendo uno en la Knesset, parlamento israelí, en el que explicó que la capital era el corazón del pueblo judío y nunca debía dividirse.

 

En un encuentro especial del gabinete agregó que veía la construcción en la ciudad como un “mandato histórico” del pueblo judío. Él hizo sus comentarios en un momento en el que Estados Unidos les había pedido a israelíes y palestinos que no tomen pasos que amenacen con la posibilidad de una renovación de las negociaciones, las cuales se rompieron a fines de abril.

 

Nabil Abu Rudaineh, vocero del presidente palestino Mahmoud Abbas, advirtió que los comentarios de Netanyahu sobre Jerusalem podrán ser obstáculos antes de los esfuerzos americanos por reavivar las negociaciones de paz. “No puede haber un acuerdo de paz con Israel sin Jerusalem del Este como la capital del estado palestino”, dijo.

 

La postura palestina fue compartida por árabes y el resto de la comunidad internacional, agregó. Además advirtió que la negativa de Israel de aceptar esta posición tendría “consecuencias graves y no contribuiría a todos los prospectos de alcanzar la paz”.

 

JC