Agencia AJN.- Jordania suspendió este jueves la proyección de la película «Amira» del director egipcio Mohamed Diab, tras fuertes críticas de que la película es «un insulto a los prisioneros palestinos».

La «Royal Film Commission» de Jordania, que es la organización oficial que presenta los premios de la Academia, también decidió retirar la película «Amira» para considerarla candidata de los Oscar 2022.

La película cuenta la historia ficticia de una joven palestina de 17 años, Amira, cuyo padre está detenido como prisionero en una cárcel israelí.

Amira fue concebida después de que sacaran por contrabando esperma de la prisión, una práctica que, según grupos palestinos de apoyo a los prisioneros, llevó al nacimiento de casi 100 niños en los últimos diez años.

La película da un giro cuando resulta que el hombre que la joven cree que es su padre, en realidad es impotente. Por ende, ella cree que su madre quedó embarazada con el semen de un guardia israelí.

La película tuvo su estreno en la Bienal de Venecia en septiembre donde ganó dos premios.

No obstante, tras una ola de reacciones violentas en las redes sociales, en los últimos días se observó un coro de quejas de sectores palestinos, así como de familias con niños concebidos a través del ‘contrabando de esperma’.

Por su parte, el Ministerio de Cultura de la Autoridad Palestina señaló que la película «abusó de la dignidad de los prisioneros, su heroísmo y su gran lucha».

El palestino Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) se sumó a las críticas y categorizó al film como «ofensivo».

Um Muhannad Al-Zeben, una de las primeras mujeres en dar a luz a un niño a partir de esperma de contrabando, dijo que la película contaba efectivamente una «historia israelí» porque no representaba la lucha palestina.

Actualmente hay alrededor de 4.500 palestinos designados como prisioneros de seguridad en cárceles israelíes, según un grupo de apoyo a los prisioneros palestinos.

Siguen siendo uno de los símbolos más potentes del conflicto. Israel los ve como terroristas responsables de numerosos ataques mortales contra objetivos civiles y militares, mientras que muchos palestinos los ven como luchadores por la libertad contra la ocupación.

Al anunciar el retiro de las presentaciones de los Premios de la Academia 2022, la Comisión Real de Cine de Jordania dijo que defendía «el valor artístico de la película» creyendo que sí «resaltaba la difícil situación y la resistencia [de los prisioneros], así como su anhelo de una vida digna a pesar de la ocupación».

Sin embargo, retiró la presentación «a la luz de la gran controversia suscitada por la película y su interpretación por algunos de que daña la causa palestina y por respeto a los sentimientos de los presos y sus familias».

La película es una coproducción con socios jordanos, palestinos y egipcios. El director egipcio de la película, Mohamed Diab, también defendió la película, pero dijo que las proyecciones se detendrían hasta que lo que llamó un ‘comité especial’ de prisioneros y sus familias hubieran visto la película y ofrecido sus opiniones sobre si la película debería ser prohibida permanentemente o no.