.- El jefe de la comunidad judía del Líbano comunidad, Isaac Arazi, habló en nombre de las meras decenas de judios en el país de mayoría musulmana, y dijo: "No tenemos ninguna conexión con los que querían vivir en Palestina y matar a gente inocente". El líder comunitario hizo los comentarios al medio con sede en Londres, A-Sharq al-Awsat.

"No todos los Judios son sionistas", dijo Arazi. "Nos identificamos como libaneses y pertenecemos al Líbano al cien por cien. Nuestra condición es igual que la del resto de los libaneses. Sufrimos igual que el resto que padecen a los políticos y funcionarios cuya única preocupación es cómo ingresar nuestro dinero en sus bolsillos", expresó.

Las declaraciones de Arazi llegan poco antes de la inminente reapertura de Magen Abraham, la única sinagoga del Líbano que fue destruida durante la guerra civil del país de los cedros en los años 70.

"Estamos invirtiendo gran cantidad de recursos en la reactivación de la comunidad judía a través de la renovación de Magen Abraham, la única sinagoga que queda", relató a la vez que contó que la misma "está ubicada en el barrio donde la mayoría de los judíos viven".

"Incluso recaudamos dinero de judíos libaneses que residen en el extranjero, y los cristianos y los musulmanes también nos ayudaron", contó.

Arazi estimó que el costo de las renovaciones es de aproximadamente de un millón de dólares y dijo que comenzó a trabajar en el proyecto en mayo de 2009 como parte de los esfuerzos de reconstrucciones posteriores a la guerra de 2006 en la que se enfrentaron terroristas de Hezbollah con Israel.

Incluso Hezbollah apoyado dicho proyecto. "Este es un lugar de culto religioso y su restauración es bienvenido", dijo.

Un portavoz de Hezbollah añadió: "Nosotros respetamos la religión judía al igual que al cristianismo. Los judíos siempre vivieron entre nosotros. Nuestro problema es con la ocupación de la tierra de Israel".

Otra judía libanesa, Sonia, expresó: "No hay tal cosa como sionistas o judíos". De 60 años de edad, agregó: "Los judíos son todos uno y no hay manera de huir de su identidad", dijo.

Sonia dijo que la familia de su esposo no judío se opuso a ella a causa de su religión. Según ella, "me separé de mi familia cuando ellos decidieron ir a Israel a vivir allí. Elegí quedarme en el Líbano con mi marido y mis hijos".

FO