Agencia AJN.- Los datos del Ministerio de Salud de Israel publicados hoy mostraron que los casos graves de coronavirus en el país cayeron por debajo de 700 por primera vez desde fines de diciembre, ya que cifras separadas mostraron que alrededor del 87 por ciento de la población adulta no haredi y no árabe ha recibido la vacuna contra el COVID-19 o recuperado de la enfermedad.

Según cifras del ministerio, el miércoles se diagnosticaron 4.143 nuevos casos, lo que eleva el recuento desde el inicio de la pandemia a 791.319, incluidos 42.276 casos activos.

De ellos, 699 se encontraban en estado grave, incluidos 261 clasificados como críticos y 224 pacientes con ventiladores. El número de muertos se elevó a 5.815.

Además, 4.859.948 israelíes han recibido la primera dosis de vacuna, de los cuales 3.576.379 también han recibido la segunda. Varios millones de israelíes no son elegibles para la vacuna, la mayoría de ellos menores de 16 años.

Según el profesor Eran Segal del Instituto Weizmann, alrededor del 87% de todos los israelíes mayores de 16 años que no son ultraortodoxos o árabes se han recuperado del COVID-19 o han recibido al menos una dosis de vacuna.

La cifra equivalente para la comunidad ultraortodoxa fue del 72%, mientras que la tasa de inmunización más baja, el 64%, se ha observado entre los árabes israelíes.

El número de reproducción básico, o R0, volvió a descender por debajo de 1 a 0,99, lo que significa que el brote ahora está disminuyendo ligeramente, dijo un grupo de trabajo militar el jueves.

El R0 es la cantidad de casos nuevos derivados de cada infección por coronavirus o la cantidad de personas que contrajeron el virus de cada persona infectada. Cualquier número inferior a 1 significa que la pandemia se está desacelerando, mientras que un número superior a 1 significa que se está expandiendo. Las cifras se basan en nuevos números de casos de 10 días antes debido al período de incubación del virus.

El viceministro de Salud, Yoav Kisch, declaró esta semana que una nueva reapertura de negocios planeada para el domingo podría detenerse si el número R0 estaba por encima de 1,1 cuando el gabinete se reúna en las próximas horas.

Sin embargo, funcionarios de salud anónimos confiaron al periódico Maariv que existía la preocupación de que el plan de reapertura estuviera siendo influenciado por las consideraciones políticas del primer ministro Benjamin Netanyahu antes de las elecciones del 23 de marzo.

“En los últimos días ha habido una decepción generalizada en el Ministerio (de Salud) por la conducta del primer ministro. Ha estado muy con nosotros todo el tiempo, pero de repente sentimos que la elección está afectando sus consideraciones”, dijo la fuente.

Mientras tanto, se informa que un empleado del Ministerio de Salud está siendo investigado por presuntamente ayudar a una persona a falsificar certificados de vacunación o recuperación, que se requieren para ingresar a algunos lugares.

Según Army Radio, la investigación comenzó después de que un falsificador publicó un mensaje en Telegram diciendo que una «fuente interna» lo ayudó a superar las medidas de seguridad e ingresar los nombres de los clientes en el sistema computarizado.

El falsificador también publicó videos de clientes con su certificación de falsificación.

Cuando se le pidió un comentario a Army Radio, la Policía de Israel dijo que no confirmaría ni negaría la investigación.

Un mercado negro de certificados de vacunación falsificados está prosperando en Telegram, donde más de 100.000 usuarios se han unido a grupos que ofrecen las falsificaciones a un precio, informó el canal 12 de noticias.

Telegram ha sido criticado por el Ministerio de Salud por ser un “bastión de noticias falsas”, según la evaluación de un equipo que ha estado buscando en Internet información errónea que podría disuadir a las personas de vacunarse.