Agencia AJN.- Este viernes, en Jerusalem, iles de fieles musulmanes abarrotaron el lugar sagrado del Monte del Templo para rezar, violando las directrices de salud pública que limitan las multitudes al aire libre a 20 personas. La cadena pública Kan calculó que asistieron unos 15.000 fieles y las fotos de la escena mostraban a los participantes pegados entre sí y muchos de ellos sin máscaras.

El medio de comunicación Arutz Sheva informó de que las fuerzas de seguridad israelíes impidieron que decenas de palestinos entraran en lo que los musulmanes denominan el recinto de Al-Aqsa, pero los agentes no pudieron impedir la aglomeración masiva que se produjo.

Era la primera vez que el recinto se abría para las oraciones del viernes después de un cierre de 45 días debido al aumento del número de casos de COVID-19, dijo AFP.

Las imágenes mostraban grandes multitudes tanto en el recinto como en el interior de la propia mezquita de Al-Aqsa.

En diciembre, el zar del coronavirus de Israel, Nachman Ash, reconoció que Israel no tiene forma de hacer cumplir las restricciones de la pandemia en el Monte del Templo, donde decenas de miles de fieles musulmanes se reunían cada viernes. «No hay solución», dijo Ash durante una reunión a puertas cerradas sobre el tema.

El Waqf, un consejo nombrado por Jordania, supervisa los lugares sagrados musulmanes en Jerusalem. Reclama la autoridad exclusiva sobre el complejo del Monte del Templo y dice que no está sujeto a la jurisdicción israelí. Las tensiones se intensifican a menudo en el lugar.

El Monte del Templo es el lugar más sagrado del judaísmo, ya que en él se encuentran los templos bíblicos. Es el lugar del tercer santuario más sagrado del Islam. Israel capturó el Monte del Templo y la Ciudad Vieja de Jerusalem en la Guerra de los Seis Días de 1967, y extendió la soberanía a toda la ciudad. Sin embargo, permitió que el Waqf siguiera manteniendo la autoridad religiosa en la cima del monte, donde los judíos pueden visitarlo, pero no rezar.

El papel de Jordania como custodio quedó consagrado en el histórico acuerdo de paz entre Israel y Jordania de 1994.

El Monte del Templo también estuvo cerrado durante semanas en marzo, cuando Israel impuso un cierre por coronavirus en todo el país. En septiembre, cuando Israel inició su segundo cierre nacional, el Waqf dijo inicialmente que cerraría el recinto, pero luego revocó la decisión, temiendo que se permitiera a los fieles judíos seguir visitándolo.

A principios de esta semana, el alcalde de Jerusalem, Moshe Lion, advirtió a los funcionarios árabes locales de la ciudad que no se permitiría a los residentes no vacunados acudir a las mezquitas, escuelas u hoteles.

La reunión entre el alcalde y los responsables de varios barrios de la ciudad se celebró en medio de la preocupación por las bajas tasas de vacunación en Jerusalem Oriental.

La legalidad de impedir que las personas no vacunadas asistan a reuniones o vayan al trabajo sigue siendo objeto de debate mientras el país lucha por añadir incentivos a su programa de vacunación, líder en el mundo, que ha ido perdiendo impulso.

Se dice que las autoridades sanitarias están muy preocupadas por la próxima festividad del Ramadán, una época de grandes reuniones, combinada con las bajas tasas de vacunación entre los árabes-israelíes y con la cepa británica del virus, altamente contagiosa, haciendo estragos.

Según los datos publicados por Kan news, Jerusalem Oriental es una de las localidades árabes con las tasas de vacunación más bajas del país, ya que sólo el 13% de los residentes han recibido la primera vacuna. En comparación, la tasa de vacunación a la primera es del 20% en Rahat, del 26% en Taibeh, del 30% en Umm al-Fahm, del 32% en Nazaret, del 41% en Shfaram y del 43% en Tamra.

Sin embargo, las cifras actualizadas del Ministerio de Salud sobre el coronavirus mostraron que los efectos de la campaña de vacunación en todo el país seguían mostrando un impacto. El número de enfermos graves siguió disminuyendo de forma constante, alcanzando los 1.002 el jueves, la cifra más baja en semanas. También hubo sólo 54 nuevos pacientes graves el jueves, la mitad de la cantidad del día anterior.

El jueves se registraron 4.931 nuevos casos, lo que eleva el número total a 718.746, de los cuales 61.920 son activos. De las 75.587 pruebas realizadas el jueves, el 6,7% dieron positivo. El jueves murieron seis israelíes más, 23 menos que el día anterior, con lo que el recuento total de muertes fue de 5.304.

Más de 3.780.710 israelíes han recibido la primera dosis de la vacuna y 2.415.692 han recibido las dos dosis.