Agencia AJN.- El Gobierno norteamericano se opone con vehemencia a todo lo que Hamás es y representa. Recientemente, el líder militar de Hamás, Yahya Sinwar, concedió una entrevista al diario israelí Yediot Ajaronot en la que habló con moderación, deseos de alcanzar un cese de fuego y aseguró que “hay que darle a los niños palestinos la oportunidad de ser médicos, o lo que deseen ser y ver cómo es el mundo del otro lado”.

En un artículo publicado hoy por Jason Greenblatt en el diario israelí Israel Hayom y el palestino Al Quds, el enviado escribe: “Compartimos el mismo deseo de ver una economía próspera en Gaza, con empleo para todos aquellos que buscan trabajo. Ambos entendemos que la guerra no conducirá a una vida mejor para los palestinos en Gaza; De hecho, la guerra llevará a más desdicha y pérdida para todos. A pesar de este punto de consenso, la Administración Trump no está de acuerdo con Hamás sobre cómo mejorar las vidas de los palestinos. Hamás eligió el terrorismo porque, en su opinión, la violencia es un medio para alcanzar objetivos políticos. Pero el Sr. Sinwar también dijo que esto estaba condenado al fracaso. Hamás nunca vencerá a Israel, y cada cohete o cometa incendiarios con forma de esvástica, cada túnel terrorista, sólo acerca a Gaza a la destrucción, no a la prosperidad”.

“Además, la vieja táctica de la amenaza de violencia con el objetivo de obtener ayuda internacional ha fracasado. Como hemos dicho una y otra vez, Estados Unidos se preocupa por los palestinos y queremos ayudarlos, pero no fortaleceremos a un régimen que lance ataques con cohetes contra jardines de infantes en Israel. Los proyectiles que impactaron en hogares israelíes y causaron el cierre de escuelas en Beer Sheva, generaron un retroceso en los esfuerzos internacionales para mejorar las vidas de los palestinos en Gaza”, expresó Greenblatt.

Entrando en la cuestión interna palestina, el enviado norteamericano manifestó que “Hamás necesita la Autoridad Palestina, que trabaje con los países interesados ​​en ayudar, para establecer instituciones sólidas y brindar servicios a los ciudadanos. Gaza necesita la participación y el apoyo del mundo para mantener las luces encendidas y tener agua potable, y necesita que Estados Unidos ayude a los palestinos e israelíes a encontrar una manera de lograr una paz integral y duradera”.

“Si Hamás quiere que Gaza sea como Singapur o Dubai, como aseguró Sinwar, es hora de que las acciones de la organización sean coherentes con este objetivo. Hamás debe aceptar el cambio y adoptar los valores en los que Sinwar dice creer: democracia, pluralismo, cooperación, derechos humanos, libertad. Estos valores no existen en Gaza. Está muy claro que la violencia, la corrupción y la supresión de la libertad de expresión son incompatibles con estos valores. También son incompatibles con el acuerdo de paz que estamos tratando de promover”.

“Desde que Hamás tomó el poder, los palestinos en Gaza sufren cada vez más dificultades y la pobreza ha aumentado. Nosotros, y otros en el mundo, hemos dejado claro a Hamás que, si quiere dejar de ser considerado como una organización terrorista armada, debe tomar las siguientes medidas: renunciar a la violencia, reconocer a Israel y aceptar acuerdos anteriores. Hamás debe mostrar al mundo que realmente se preocupa por los palestinos y permitir que la Autoridad Palestina regrese para que todos los palestinos se unan bajo un liderazgo”.

Por último, el enviado especial de Donald Trump a Medio Oriente, Jason Greenblatt, advierte que, en el caso de que Hamás realmente quiera un cambio y la paz con sus vecinos “el plan de paz norteamericano “ofrecerá un cambio, que será el regalo más importante que Sinwar le pueda dar a sus hijos y a los niños que su organización asegura que le importan. Si las palabras de Sinwar fueran solo un truco para obtener atención y simpatía y distraer la atención de los fracasos de Hamás, nada cambiaría. Hamás continuará conduciendo a Gaza de una terrible ola de violencia a la siguiente”.