Agencia AJN.- El ex rehén israelí Yarden Bibas, quien fue liberado por la organización terrorista palestina Hamas el 1° de febrero después de casi 16 meses de cautiverio, se aferra a la esperanza de que su esposa Shiri y sus hijos pequeños, Ariel y Kfir, todos ellos argentinos, sigan vivos, dijo su hermana, Ofir.

En una entrevista con el Canal 12, confirmó que los captores de Hamas inicialmente le mintieron y le dijeron que su familia estaba a salvo en Tel Aviv y «él les creyó». Y señaló que a fines de noviembre de 2023 le dijeron y anunciaron públicamente que los tres estaban muertos, una afirmación que Israel no ha confirmado.

Yarden salió de Gaza «con un entendimiento muy similar al nuestro -dijo Ofir-; es decir, entiende que hay miedo, miedo por sus vidas, pero sabe que no hay certezas y se aferra a la esperanza. Nosotros nos hemos aferrado (a ella) durante 15 meses y seguimos aferrándonos a ella, y seguimos esperándolos y aguardándolos aquí, en casa.”

Sin embargo, también dijo: “Él necesita certeza. Todos. Para cerrar el círculo. Lo pedimos desde un lugar donde todavía nos aferramos a la esperanza. No perdemos la esperanza ni por un segundo, especialmente ahora que está aquí con nosotros. Pero sí, los queremos en casa”.

Sobre el anuncio de Hamás de que retrasaría la liberación de rehenes del sábado dijo: “Lo que está sucediendo ahora es muy aterrador: hay muchos temores sobre esta etapa. Y ciertamente sobre que la siguiente etapa llegue a buen término”.

Cuando se le preguntó si Yarden es consciente de que su mujer y sus hijos se han convertido en una especie de símbolo de la crueldad de los terroristas, Ofir dijo: “Está empezando a entenderlo. Entiende que ya no es anónimo y que hay mucho interés en la familia. No es fácil para él aceptar eso. Un hombre anónimo que se da cuenta de que las fotografías [de él y su familia] están por todo el mundo y que todo el mundo conoce a la familia”.

Dijo que Yarden comienza a hablar un poco más alto y salir de sí mismo y que conservó su sentido del humor, pero “hay mucha ira”.

Su ira está, en primer lugar, “dirigida a Hamás, por supuesto”, pero también “preguntó mucho: ¿dónde estaba el Ejército? ¿Cómo puede ser que no nadie” acudiera al rescate el 7 de Octubre?

Bibas fue secuestrado por separado de Shiri, Ariel y Kfir, cuando terroristas de Hamás asaltaron su casa en el kibutz Nir Oz después de que él saliera de la habitación segura con la esperanza de distraerlos y salvar a su familia.

“Todavía me cuesta creer que está aquí -dijo Ofir-, pero extrañamos a Shiri y a los chicos. Tengo muchas ganas de que se complete este acuerdo. Este marco fue muy complicado desde el principio. Y vemos que puede estallar en cualquier momento”.

Y concluyó: “Espero que si hay algún malentendido, lo aprovechen para mejorar los términos del acuerdo, acortar el plazo y adelantar la segunda fase. No necesitamos más testimonios impactantes y más rehenes que vuelvan a casa [en las condiciones] en que lo hicieron [en los últimos días]. Sabemos que están pasando un infierno allí. Todos necesitan estar en casa. Esto no puede prolongarse más”.