Agencia AJN.- Una fuente de seguridad relacionada con las relaciones militares entre Israel y los Estados Unidos reveló el viernes que las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) transmitieron a los estadounidenses información de inteligencia recibida en Jerusalem, que sirvió, entre otras cosas, como base para la declaración del portavoz de las IDF de que los hijos de la familia Bibas, Kfir y Ariel, no murieron en el bombardeo del ejército, como afirmaron las organizaciones terroristas en Gaza, sino que fueron brutalmente asesinados por sus captores.

Según la información, los miembros de la organización terrorista ‘‘Ejército de los Muyahidines’’, una organización particularmente extremista al estilo de las que operan en la Franja, asesinaron a los hijos de la familia días o semanas después del secuestro.

En un momento determinado, después del asesinato, la inteligencia israelí ya sabía que los tres miembros de la familia -Kfir, Ariel y su madre Shiri- ya no estaban vivos.

La familia Bibas incluso recibió un mensaje de que existía un gran temor por sus vidas. Sin embargo, el Comité de los Tres (el comité médico que decide declarar muerto a un rehén incluso si su cuerpo está en la Franja de Gaza) no los declaró muertos porque no contaba con la evidencia médica requerida.

La inteligencia israelí reunió información que reveló que los tres miembros de la familia fueron asesinados con diabólica crueldad por sus captores.

Después, los mismos captores que debían mantenerlos con vida para realizar intercambio de cautivos por reclusos palestinos, provocaron más daños en los cuerpos de los Bibas para que pareciera que habían muerto en un bombardeo aéreo o por sus consecuencias.

Al recibir la información, cuyos detalles, según personas familiarizadas con ella, son ‘‘los más impactantes a los que fuimos expuestos desde el 7 de octubre’’, se llevaron a cabo varias discusiones, incluso con la participación del portavoz de las IDF, el general de brigada Daniel Hagari, al igual que otros miembros de alto rango del Estado Mayor, para decidir qué hacer con la información.

Una de las opciones era mantenerla como inteligencia clasificada y la otra compartirla con el público, principalmente para el beneficio de la opinión internacional, ‘‘para que el mundo sepa con quién estamos tratando’’, como lo expresó uno de los generales israelíes que se ocupó del tema.

Finalmente, se decidió, por el momento, compartir la información con la comunidad de inteligencia estadounidense, con la solicitud de que también se presente a los funcionarios de la Casa Blanca.

Hasta donde se sabe, la información fue revisada por expertos en contenido de la inteligencia estadounidense, y después de llegar al mismo análisis y conclusiones que los expertos israelíes, la compartieron con el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.

Tras revisar los materiales y compartirlos con el presidente Donald Trump, el asesor de seguridad nacional Mike Walz expresó: ‘‘Los niños de la familia Bibas fueron asesinados por Hamás y no fueron bombardeados por error. Esto es pura maldad. Hamás es una organización terrorista de la peor clase. No son mejores que ISIS: deben ser destruidos’’.

‘‘Trump está destrozado y conmocionado por lo que nos está pasando. Si alguien piensa que Hamás no es una organización tan terrible, ¿qué más pruebas necesita?’’, agregó.

En este contexto, cuando en una entrevista con la cadena Fox le preguntaron al presidente Trump sobre los asesinatos de Kfir y Ariel Bibas, así como sobre el brutal ‘‘ritual’’ de Hamás para trasladar los cuerpos, advirtió: ‘‘Fue terrible, muy duro. Parecía que ellos (Hamás) estaban celebrando cuando trajeron los cuerpos. Fue una escena inimaginable. Tan bárbara. Es difícil creer que esto esté sucediendo en la era moderna’’.

Fuente: Ynet News