Agencia AJN.- Alemania y Francia advirtieron el martes contra la prohibición de visados de turista para los rusos en la Unión Europea, argumentando que sería contraproducente, destacando las divisiones dentro del bloque de 27 naciones mientras los ministros de exteriores se preparaban para discutir la medida.

Los países del Este y los nórdicos apoyan firmemente dicha prohibición, afirmando que viajar a la UE es un privilegio, no un derecho, y que permitir que los rusos se diviertan en las playas europeas en un momento en que su país invadió Ucrania es inaceptable.

El Kremlin calificó de «irracional» la propuesta de prohibición, mientras que París y Berlín aseguraron que, seis meses después de la guerra, la UE debería evitar penalizar a los rusos que pudieran oponerse a las acciones de su gobierno y albergar simpatías prooccidentales.

«Advertimos contra las restricciones de gran alcance en nuestra política de visados, para evitar alimentar la narrativa rusa y desencadenar efectos involuntarios de concentración en torno a la bandera y/o alejar a las generaciones futuras», expresaron Francia y Alemania en un memorando conjunto visto por Reuters.

Un diplomático de la UE dijo que las divisiones sobre el tema hacían improbable un acuerdo en la reunión de dos días de los ministros en Praga.

Como compromiso temporal, los ministros podrían acordar en principio la suspensión de un acuerdo de facilitación de visados, lo que significaría que los rusos se enfrentarían a un procedimiento más largo y tendrían que pagar 80 euros en lugar de 35 por su visado de la UE, señaló el diplomático.

Pero eso podría no ser suficiente para los países favorables a la prohibición, especialmente los que tienen frontera con Rusia, algunos de los cuales ya dejaron de expedir visados individualmente.

«Espero que seamos capaces de acordar una solución europea común que permita limitar significativamente el flujo de turistas de Rusia a Europa», afirmó el ministro lituano de Asuntos Exteriores, Gabrielius Landsbergis, en un comunicado.

«Si los 27 países de la UE no consiguen llegar a un acuerdo, se podrá buscar en el futuro una solución regional para los países más afectados por el flujo de turistas rusos», agregó Landsbergis.

Finlandia, que tiene una larga frontera terrestre con Rusia y dice que no quiere convertirse en un centro de entrada de turistas rusos a la UE, redujo drásticamente el número de visados que les concede.

A principios de este mes, Estonia cerró su frontera a más de 50.000 rusos con visados previamente expedidos, siendo el primer país de la UE en hacerlo.

«Me resulta muy provocativo que se vean hombres rusos en las playas del sur de Europa y que, al mismo tiempo, hombres ucranianos de entre 18 y 60 años no puedan ni siquiera salir de su país, sino que tengan que luchar por su libertad», declaró la semana pasada el Ministro de Asuntos Exteriores de Dinamarca, Jeppe Kofod.

Describiendo las peticiones de prohibición de visado como un ejemplo de la «agenda antirrusa» de Occidente, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, expresó: «Paso a paso, por desgracia, tanto Bruselas como las distintas capitales europeas están demostrando una absoluta falta de razón».

Además, Peskov añadió que cualquier prohibición de visado «no quedará sin respuesta».

Los ministros de Defensa de la UE también se reunieron en Praga el martes y parecía probable que acordaran en principio organizar misiones conjuntas de entrenamiento militar para las tropas ucranianas.