Agencia AJN.- «Estamos liderando el mundo en la salida del coronavirus y la plena reanudación de las clases también en las escuelas intermedias es una clara señal de ello», subrayó el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, al visitar uno de esos colegios.

«Quiero enfatizar dos cosas: primero, todavía no nos liberamos de los tapabocas; es decir, dentro de las instalaciones y de las aulas, usamos máscaras, y afuera se pueden bajar, aun cuando todavía se recomienda tenerlas en eventos multitudinarios», aclaró.

«La segunda es que aún no terminamos con el coronavirus porque puede volver», advirtió el jefe de gobierno hebreo.

Después de largos meses de idas y venidas, de aumentos y descensos de casos por coronavirus en Israel, el virus da un respiro y desde ayer los israelíes pueden circular por espacios abiertos sin barbijos y en escuelas podrán estudiar sin burbujas.

El tapabocas será obligatorio en ambientes cerrados como transporte escolar, comercios, estudios. Además, desde jardín de infancia hasta quinto año del secundario estudiarán seis días a la semana y sin separación de grupos en cápsulas, tal como antes de la pandemia.

Por su parte, El Centro Médico de la Universidad de Hadassah cerró su última sala COVID-19, dijo el hospital el lunes.

Solo quedan seis pacientes con COVID en el hospital.

El Centro Médico Hadassah es una organización médica israelí establecida en 1934 que opera dos hospitales universitarios en Ein Kerem y Mount Scopus en Jerusalén Occidental, así como escuelas de medicina, odontología, enfermería y farmacología afiliadas a la Universidad Hebrea de Jerusalén.

Hadassah vio más pacientes con coronavirus durante la pandemia que cualquier otro hospital israelí. La instalación está situada en el corazón de Jerusalén, rodeada de grandes comunidades haredi (ultraortodoxas) y árabes.

El hospital admitió el año pasado a 4.500 pacientes, un 10% que ingresó en la unidad de cuidados intensivos.

Hubo días en que el hospital manejó a 150 pacientes con COVID-19 a la vez.

A medida que la infección ha disminuido en todo Israel, la mayoría de los hospitales han cerrado sus unidades de coronavirus.

En tanto, ayer Nachman Ash explicó que el país aun está lejos de alcanzar la inmunidad de rebaño, pero que aun así, el país alivió aun más las restricciones que rigen desde marzo de 2020.

Ya no es obligatorio el uso de barbijos en espacios abiertos siempre y cuando no haya aglomeración de público. No obstante, en ambientes cerrados será siempre obligatorio su uso.

La mayoría de los chicos en edad escolar, a excepción de los grupos de educación especial, estuvieron en sus casas la mayoría de estos meses cursando a distancia, y ayer desde educación inicial hasta el último año de secundario regresaron a las aulas, sin ningún tipo de restricción de intercambio grupal para docentes entre cursos a enseñar o cápsulas.

Aun deben usar barbijo en el interior en las clases, mantener distanciamiento social, ventilación de aulas y la higiene personal. Solo no deben utilizar tapabocas en recreos, hora de almuerzo y clases de educación física.

Los padres de los chicos que están en jardín de infante aun no pueden ingresar con sus hijos al establecimiento educativo.

En los grados intermedios y educación secundaria, los directores pueden integrar el aprendizaje a distancia hasta una quinta parte de las horas de clases, junto con una combinación de estudios individuales y grupales en las escuelas.

El Ministerio de Salud informó esta mañana que en las últimas 24 horas 82 personas dieron positivo, lo que representa el 0.8% de los 11.085 tests practicados.

El ritmo reproductivo básico de la enfermedad se situó en 0.71. Desde iniciada la pandemia se contagiaron en el país 836.926 personas, de las cuales 6.334 fallecieron.

Actualmente hay en Israel 2.540 casos activos, de los cuales solo 337 están internados en hospitales y 19 en hoteles especiales para pacientes. Solo hay 206 pacientes de gravedad, de los cuales 126 están conectados a respirador artificial.

La campaña masiva de vacunación sigue su curso y 5,3 millones de israelíes recibieron la primera dosis y 4,9 ambas necesarias para la inmunidad adquirida.