Agencia AJN.- El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se reunía con el multimillonario asesor de Donald Trump Elon Musk en Washington ayer, lunes, cuando se les unió el propio Presidente estadounidense, pese a que ambos tienen previsto conversar oficialmente hoy, martes.

Luego, Netanyahu se reunió con líderes de la comunidad evangélica estadounidense en Washington.

Entre los asistentes se encontraba el exgobernador de Arkansas Mike Huckabee, quien es el candidato de Trump a embajador de Estados Unidos en Israel.

Después, Netanyahu se reunió con el enviado para Medio Oriente, Steve Witkoff, en la casa de huéspedes Blair House de Washington, donde se aloja.

El acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes israelíes cautivos de organizaciones terroristas palestinas en Gaza estuvo en la cima de la agenda.

Witkoff estuvo acompañado por el asesor de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Mike Waltz.

Horas antes, Trump evitó responder la pregunta de un periodista sobre si apoyaría una anexión de la Margen Occidental por parte de Israel.

“No voy a hablar de eso. Sin dudas es pequeño. Es un pequeño país en términos de territorio”, dijo en el Salón Oval.

“¿Ves esta lapicera?”, continuó, sosteniendo la que estaba usando para firmar órdenes ejecutivas. “Esta maravillosa lapicera en mi escritorio es Medio Oriente y la parte superior de la lapicera es Israel”.

“Eso no es bueno, ¿verdad? Ya sabés, es una diferencia bastante grande. Lo uso como una analogía; es bastante precisa, en realidad”.

“Es un bonito pedazo de tierra pequeño. Es sorprendente lo que han podido hacer, cuando lo pensás. [Hay] mucho poder mental, bueno e inteligente, pero es un pedazo de tierra muy pequeño. No hay duda al respecto», dijo.

Por otra parte, Trump tendría previsto firmar hoy una orden ejecutiva que prohíba la futura financiación de la agencia de la ONU de ayuda a los refugiados palestinos, UNRWA, además de retirar nuevamente a los Estados Unidos del Consejo de Derechos Humanos.

El gobierno de Biden congeló el año pasado la financiación de la UNRWA tras revelarse que varios de sus empleados habían participado activamente en el ataque de Hamás del 7 de Octubre. Los legisladores estadounidenses aprobaron entonces una ley que prohíbe la reanudación de la financiación de la UNRWA hasta el mes que viene, una directiva que el Congreso controlado por los republicanos casi seguramente extenderá indefinidamente.

Biden había renovado la financiación de la UNRWA después de que Trump la recortara en su primer mandato, cuando también retiró a los Estados Unidos del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, argumentando que era demasiado crítico con Israel.