Agencia AJN.- Arabia Saudita informó a la Casa Blanca que aceptará aumentar su producción de petróleo para obtener apoyo en el Congreso para el acuerdo de normalización con Israel, informó este sábado, el Wall Street Journal.

Según el informe, los saudíes, que recientemente anunciaron que mantendrán el recorte de petróleo de un millón de barriles por día hasta finales de 2023, aceptarán aumentar la producción a principios de 2024 si los precios mundiales del petróleo son altos, una medida diseñada para generar confianza con los legisladores estadounidenses que se oponen a las concesiones a Riad en los campos nuclear y de seguridad.

Este entendimiento es parte del esfuerzo por firmar un acuerdo que probablemente también incluirá asistencia nuclear de Estados Unidos y representa un cambio notable para Riad, que hace un año rechazó una solicitud de la administración Biden para ayudar a bajar los precios del petróleo y combatir la inflación. Sin embargo, en las negociaciones, los sauditas enfatizaron que las condiciones del mercado guiarán cualquier acción relacionada con la producción, y fuentes familiarizadas con las conversaciones dijeron que las discusiones no representan un acuerdo a largo plazo para bajar los precios.

Dos altos funcionarios de la Casa Blanca, Brett McGurk y Amos Hochstein, volaron a Arabia Saudita el mes pasado, donde enfatizaron que el aumento de los precios del petróleo dificultará que los sauditas obtengan apoyo en Washington. La visita de ambos a Arabia Saudita se produjo en un contexto de aumento de los precios del petróleo.

Las conversaciones sobre el acuerdo se centraron en el reconocimiento saudita de Israel -una medida que podría renovar la geopolítica de Medio Oriente- a cambio de la venta de armas estadounidenses, garantías de seguridad y asistencia para construir un programa nuclear civil. Este acuerdo parece ser un paso diplomático importante para el presidente Biden, que se enfrenta a una dura lucha en las elecciones presidenciales.

Arabia Saudita no ha reconocido a Israel desde su creación en 1948, y un acuerdo para establecer relaciones diplomáticas ampliará los vínculos de Israel con el mundo árabe y también puede limitar las ambiciones militares de Irán y frenar los esfuerzos de China por rechazar la influencia estadounidense en la región.