Sergio Burstein, miembro de Familiares, apuntó durante el acto recordatorio del atentado, contra los empresarios que, según trascendió en los últimos días, comercian con Irán por un valor de varios millones de dólares y consideró agravada la situación porque uno de ellos es judío.
Por el atentado, hay seis ex funcionarios iraníes con pedido de captura por la justicia argentina. Sin embargo, y a pesar de que las relaciones comerciales quedaron virtualmente congeladas desde que el kirchnerismo respaldó la investigación judicial sobre la AMIA, el comerció con aquel país se reavivó.
"Grande fue la sorpresa de Familiares cuando se enteraron que no sólo Uruguay comercia con Irán, sino que el comercio argentino superó los varios millones de dólares. ¿Cómo es posible? ¿Cómo puede haber gente que negocie con la muerte de nuestros familiares?", exclamó Burstein y afirmó que se trata de un pool económico con un integrante judío, en alusión al empresario Gustavo Grobocopatel, que en diálogo con AJN avaló el aumento del intercambio comercial con el país islámico y señaló que "el comercio ayuda a la paz".
"Esa gente que comercia con Irán tiene una sola patria y una sola religión que es el dinero", subrayó Burstein y criticó los comentarios de Grobocopatel, dirigiéndose a él como "esa persona".
"Solo con verdad y justicia vamos a vivir en paz, no haciendo negocios, pues nuestra religión no es el dinero, sino el dolor, y le quiero preguntar a este buen señor si en la época de los nazis hubiera hecho negocios con ellos para lograr la paz", enfatizó.
Por último, pidió "que no hablen de paz y justicia, que dejen de comerciar, que respeten a los muertos y a su patria, la invasión a la soberanía argentina, que provocó que murieran más de 100 personas, en donde un país que se llama Irán está siendo sospechado de ser responsable".
Burstein también se refirió al discurso de la presidenta Cristina Fernández en la Asamblea General de la ONU, en el que se confirmó que reclamará a Irán por la falta de colaboración con la investigación del atentado: "Esperamos que lo que la presidenta diga este año no quede en saco roto y que los países que pueden ayudar denuncien y señalen a Irán como lo que es, un estado terrorista", remarcó.
Al acto de hoy a la mañana en la calle Pasteur asistieron tres divisiones de colegios secundarios judíos: Martín Buber, Sholem Aleijem y Ort II. Michele Elbaum, Martín Minscuich,
Matías Silberstein, Federico Gocin y Katja Kit hablaron en representación de sus compañeros.
"La memoria es el arma más eficaz de la lucha para el recuerdo de las 85 almas. Vinimos para adherir al permanente reclamo de justicia y de que se mantenga viva la memoria de lo que ocurrió, para recordar de la forma más digna que se merecen los seres inocentes", destacó Kit. 
Al discurso de los adolescentes, Burstein lo calificó como "un canto de esperanza" y dijo: "Si bien prácticamente nacieron con la bomba, tienen bien claro que no hay que acostumbrarse a vivir con la injusticia, que hay que luchar para la justicia, y que si quien tiene que luchar por la justicia no lo hace, ellos van a continuar el camino que los familiares iniciamos", finalizó.
Estas declaraciones surgen a horas de que las dos instituciones centrales de la comunidad judía, AMIA y DAIA, confirmaran su viaje a la Asamblea General de las Naciones Unidas esperando encontrarse con un "enérgico discurso" de la presidenta Kirchner que inste a la colaboración de Irán con la justicia.
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