La jueza y ex esposa del fallecido fiscal Alberto Nisman, Sandra Arroyo Salgado, afirmó ayer que “la historia argentina le dio a Nisman un lugar por el que él hizo mucho”, en el marco de un homenaje que le realizó la comunidad Lamroth Hakol.

Arroyo Salgado destacó que “muchos miembros de la comunidad judía, y argentinos en general, reconocen su labor en el esclarecimiento del atentado terrorista en la AMIA. Puso todo en riesgo para llevar la verdad a los familiares de las víctimas y llevar a la justicia a los responsables”.

El homenaje consistió en la colocación de una hoja en el árbol de la vida que tiene el Templo, donde figura el nombre y la fecha de fallecimiento del fiscal.

Entre los familiares de Nisman también estuvieron su hija mayor, Iara; y su madre, Sara Garfunkel, quien agradeció la iniciativa y especialmente la participación del diputado Waldo Wolff.

Por parte de la Comisión Directiva de Lamroth Hakol, participaron el presidente Raul Schwartzman; los ex presidentes Carolina Strauss y Daniel Belinky; el vicepresidente Carlos Schuster; y el rabino Fabián Skornik.

“Hay una frase en nuestra cultura que dice ‘lo pasado, pisado’. Pero para nosotros es exactamente lo opuesto: lo pasado es pesado, porque pesa, porque cuenta y porque tiene sentido. El pasado debe ser traído siempre al presente, con la intención de mantenerlo vivo y aprender de él, nutrirnos de él y poder seguir construyendo en base a su legado. Es por esto que estamos aquí frente a un árbol que representa la vida. La vida para nosotros es más allá de la vida física. Convencidos de esto, sabemos que hay nombres que nos inspiran permanentemente. Por eso, es importante que estemos todos hoy aquí para recordar al fiscal Alberto Nisman”, manifestó el rabino Skornik.

Por su parte, el presidente de la institución afirmó: “Sumándome a las palabras del rabino, quisimos hacer este homenaje, agregando una hoja a nuestro árbol de la vida. Reconociendo en Nisman la valiosa labor que hizo en la investigación por el atentado a la mutual israelita, pagando por ello con su vida. Por eso, los seres queridos son parte de nuestro árbol. Quiero agradecer a los familiares que nos han permitido este homenaje”.

En el acto también estuvo el diputado del PRO y ex vicepresidente de la DAIA, Waldo Wolff, uno de los impulsores del homenaje: “Soy miembro de esta comunidad y para mí es un orgullo que se reflejen estos valores. En definitiva, son valores que nos dan la identidad como colectivo. Es el valor de la memoria. Ni siquiera es una opinión nuestra: la Corte Suprema dijo que Nisman murió por su condición de fiscal y por lo que estaba investigando. Después de dos años, es la primera comunidad que honra la memoria de Nisman. Fue honrado en distintos países, como en Israel y en Chile, y espero que como parte de la construcción colectiva de esta comunidad, podamos marcar el ejemplo y que en todas las comunidades pueda haber algún gesto de reconocimiento a quien ya la historia de la República le ha dado un lugar significativo”.

Asimismo, Arroyo Salgado subrayó: “Quiero agradecer en nombre de Iara y Kala este recordatorio. Sin dudas, la historia argentina le dio al papá de mis hijas un lugar por el que él hizo mucho. Quiero agradecer este reconocimiento en su memoria”.

Para finalizar el homenaje, Iara colocó la hoja de bronce con el nombre de Nisman en el árbol de la vida.

Por último, Skornik destacó: “La presencia de Nisman en el árbol es para que su memoria y recuerdo nos traiga bendiciones. Que nos inspire con el mandato de justicia, trabajo, esfuerzo y de hacer las cosas que uno cree que son correctas. Siempre haciendo lo que se cree que hay que hacer, más allá de lo que convenga circunstancialmente. Que él (Nisman) pueda inspirar a muchos jóvenes en la construcción del camino de sus vidas”.