Agencia AJN.- El alcalde de Arad, Yair Mayan, escribió una conmovedora carta de despedida a Noa Boguslavsky tras el asesinato de la joven en el bombardeo iraní de esta mañana sobre Beer Sheba.

«Con profundo dolor y gran angustia enviamos condolencias, compartiendo el profundo dolor de la familia Boguslavsky, residentes de Arad, por el asesinato de su hija Noa, graduada del 12º grado en la Escuela ORT Arad, quien fue asesinada esta mañana por un ataque con misiles en Beer Sheba», afirmó.

«Noa era parte de la familia de Arad. Una joven en el comienzo de su carrera, y el dolor de su partida se siente en cada rincón de la ciudad. Todo Arad abraza a la querida familia en este momento difícil, enviándole calidez, consuelo y fuerza para superar los días difíciles que se avecinan», prosiguió el intendente.

«El personal de la Escuela ORT, en conjunto con los organismos profesionales del municipio y el Ministerio de Educación, acompañan al alumnado, personal y familiares, dando una respuesta personalizada», aseguró.

«La familia de Arad está con ustedes, con corazones doloridos y oraciones para que haya días más tranquilos y seguros. Bendita sea su memoria», cerró Mayan.

Agencia AJN.- En plena escalada militar entre Israel e Irán, varios bebés nacieron en salas de parto reforzadas, preparadas para operar bajo amenaza de misiles. Las instalaciones, equipadas para garantizar la seguridad de madres y recién nacidos, funcionaron sin interrupciones durante los recientes ataques.

Las imágenes difundidas muestran a los bebés envueltos en mantas azules y vestidos con bodies que llevan la frase: “Tengo una leona por madre”, en homenaje a la fortaleza de las mujeres que dieron a luz durante los bombardeos.

Pese al clima de tensión, los equipos médicos lograron mantener la atención materno-infantil en condiciones seguras. Estos nacimientos simbolizan un momento de vida y esperanza en medio de la crisis regional.

En Israel, muchos hospitales cuentan con instalaciones subterráneas, construidas a dos o tres pisos bajo tierra, diseñadas para funcionar con normalidad incluso en situaciones de guerra. Estos espacios protegidos, algunos con especificaciones antiatómicas, permiten que áreas críticas como salas de parto, quirófanos y unidades de terapia intensiva continúen operando sin interrupciones, garantizando atención médica segura tanto para civiles como para soldados heridos, incluso bajo ataques.