Agencia AJN.- Tras la protesta de Israel por el boicot antisemita contra los nadadores israelíes por parte del gobierno de Malasia en un torneo de natación paralímpico, el canciller austriaco Sebastian Kurz planteó el tema del odio a los judíos en una reunión bilateral mantenida con primer ministro de malayo, Mahathir Mohamad, en Viena.

Peter Launsky-Tieffenthal, un portavoz del gobierno austriaco, indicó a The Jerusalem Post que “después de la reunión, el Canciller dijo a los periodistas austriacos que cuando se trata de Israel y el antisemitismo, él y su contraparte tienen opiniones completamente contrarias».

Asimismo, Kurz transmitió que cualquier forma de antisemitismo en Malasia y en cualquier otro lugar es «inaceptable».

Agregó que el canciller transmitió al primer ministro de Malasia: «Austria es y sigue siendo sin duda un amigo y socio de Israel y está comprometido a combatir cualquier forma de antisemitismo donde sea que ocurra».

«El canciller Kurz dio la bienvenida al primer ministro de Malasia, Mahathir Mohamad, para una reunión de trabajo en la Cancillería Federal de Austria. Además de discutir temas de naturaleza bilateral, como la cooperación económica, el canciller Kurz aprovechó la oportunidad para plantear el problema del antisemitismo en Malasia y la posición del gobierno hacia Israel y el pueblo judío», transmitió Launsky-Tieffenthal.

Malasia ha prohibido a todos los israelíes participar en eventos organizados en ese país durante los Campeonatos Mundiales de Para-Natación, previsto para julio.

Emmanuel Nahshon, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, escribió en Twitter: «El gobierno del primer ministro de Malasia, Mahathir, prohíbe a los israelíes en todos los deportes, incluidos los atletas con discapacidades en un evento de natación paralímpicos el 19 de julio. Esto es odioso y vergonzoso y se opone totalmente al espíritu olímpico y Paralímpicos: ¡ayuda a cambiar la decisión, o el lugar!”

En contraste con el canciller, el presidente de Austria, Alexander van der Bellen, se negó a criticar el antisemitismo de Mahathir durante su reunión con el líder de Malasia.

Según un informe publicado en el diario austriaco Volksblatt, un portavoz del presidente dijo que el antisemitismo por el boicot del equipo israelí de natación «no jugó ningún papel» durante la reunión.

El portavoz, Reinhard Pickl-Herk, dijo que la conversación cubría el «multilaterismo y la protección del clima».

Volksblatt señaló que durante una conferencia de Viena sobre antisemitismo en noviembre, el presidente austríaco habló sobre la obligación de hablar contra «toda forma de antisemitismo».