Agencia AJN.- La muerte del científico nuclear iraní Mohsen Fakhrizadeh generó una furiosa respuesta retórica por parte de máximos representantes del país islámico, y tanto el ayatolá Ali Khamenei como el presidente Hassan Rouhani amenazaron con vengarse por el asesinato, que en principio se lo relacionó con los servicios de inteligencia de Israel.

Si bien las amenazas se dirigieron principalmente contra Israel, o «los sionistas», como se conoce al Estado judío en Teherán, las comunidades judías de la diáspora también están prestando mucha atención a los acontecimientos tras la muerte de Fakhrizadeh .

Irán ha sido acusado en el pasado de ataques contra objetivos judíos e israelíes fuera de Israel, incluido el bombardeo de la embajada israelí en Buenos Aires en 1992, el ataque al centro comunitario judío AMIA también de Argentina en 1994 y el bombardeo de Burgas en 2012 en Bulgaria.

Michael Masters, director nacional y CEO de la organización de seguridad Secure Community Network para comunidades judías, dijo que la organización ha trabajado con agencias federales durante la última década para rastrear las amenazas iraníes a las comunidades judías en EE.UU.

Señaló que en los últimos meses ha habido un repunte en los ataques de ciberseguridad en los EE.UU., a menudo luego de incidentes de conflicto entre Estados Unidos y Teherán, un fenómeno observado por el Departamento de Seguridad Nacional.

Masters dijo que dicha actividad ha incluido estafas de phishing, diversas actividades de fraude y esfuerzos para obtener información personal sobre funcionarios y organizaciones judíos en los Estados Unidos.

Pero dijo que no ha habido amenazas específicas y creíbles a las comunidades o instituciones judías por parte de fuentes iraníes o sus representantes tras el asesinato de Fakhrizadeh.

Al mismo tiempo, debido al aumento de las tensiones políticas en los EE.UU. debido a las recientes elecciones presidenciales, SCN ya ha estado en mayor alerta por posibles amenazas a la seguridad de la comunidad judía, en particular de grupos extremistas supremacistas blancos.

“Nos aseguramos de que nuestros socios de seguridad estén al tanto de este desarrollo porque agrega otro factor que debe ser monitoreado”, dijo Masters. “La realidad es que vivimos en una situación de seguridad muy elevada y este evento ha puesto de relieve por qué la preparación es tan importante”.

Yonathan Arfi, vicepresidente del grupo CRIF de comunidades judías francesas, dijo que incidentes como el asesinato de Fakhrizadeh siempre se consideran una fuente de mayor riesgo para los judíos franceses.

Señaló que las sinagogas están abiertas con una capacidad limitada debido al COVID-19, pero las escuelas funcionan con normalidad, incluidas las escuelas judías, que han sido blanco en el pasado de ataques terroristas contra la comunidad.

Arfi dijo que la comunidad judía francesa depende principalmente de los servicios de seguridad del Estado para brindar protección a sus instituciones, y que las organizaciones judías trabajan en estrecha colaboración con ellos y el Ministerio del Interior francés en el intercambio de información sobre amenazas a la seguridad.

Sin embargo, al igual que Masters, Arfi dijo que la comunidad judía francesa siempre está en alerta por amenazas a la seguridad debido a un historial de ataques terroristas en su contra en la última década.

«Como judíos en la diáspora tenemos una cultura de vigilancia, que está presente en todos los aspectos de la vida judía durante todo el año», dijo. «Los líderes judíos siempre deben estar atentos a la seguridad, es parte de las limitaciones de la vida judía de hoy».

De manera similar, Mark Gardner, director ejecutivo de Community Security Trust de la comunidad judía del Reino Unido, dijo que la organización ha estado en un nivel de alerta elevado debido a eventos recientes, incluido el ataque terrorista en Austria a principios de este mes.

«Las organizaciones judías ya deberían estar en alerta máxima debido al reciente ataque de Viena y la continua amenaza terrorista de extrema derecha, pero el terrorismo de estado iraní siempre está en nuestras mentes y estos eventos solo aumentarán eso», concluyó.