Agencia AJN.- Mientras que el jefe israelí saliente de la Asociación Médica Mundial, doctor Leonid Edelman, afirmó que un cierre general sería visto como una admisión de fracaso por parte del gobierno israelí, otros médicos de alto rango, como el jefe del Instituto de Sistemas Complejos de Nueva Inglaterra, Yaneer Bar-Yam, aseguró que un bloqueo total es la única forma que queda para que el país pueda combatir la propagación del coronavirus.

Según Bar-Yam, experto en el análisis de pandemias, un cierre nacional ordenado por el gobierno seguramente detendrá la creciente propagación de COVID-19 en Israel. «No entiendo por qué no solo ven la cuarentena de esa manera», dijo Bar-Yam en declaraciones al portal de noticias Ynet.

«El contagio ahora se está extendiendo rápidamente. Si impones solo un bloqueo parcial, o retrasas un bloqueo total, solo disminuyes su propagación, no irá a ninguna parte. Solo un bloqueo general severo hará que el virus desaparezca por completo», enfatizó el especialista.

Bar-Yam dijo que el cierre no es exclusivo de Israel, ya que muchos países emplearon con éxito esa medida durante su propia lucha contra el contagio. «Hay 50 países en todo el mundo, incluida Nueva Zelanda, que han alcanzado casi cero nuevas infecciones gracias al cierre», argumentó.

«Si después del cierre hay pequeños brotes en ciertos lugares, se pueden tratar, pero no introducir un cierre es como jugar con fuego», indicó el especialista.

El cierre impuesto durante la primera ola de infección por coronavirus llevó a Israel a ver solo un puñado de nuevos pacientes cada día, apuntó Bar-Yam. «Hubo una situación aquí de 10 nuevos casos de infección por día o incluso menos. Si hubieran (retrasado la reapertura) por unos días más, no habría habido más casos nuevos», dijo. «Cuando hay un cierre, las personas no se infectan entre sí», explicó.

El número de nuevos casos diarios de coronavirus en Israel el jueves superó la marca de 2.000 por segundo día consecutivo, señalaron funcionarios de salud.

El ministro de Salud, Yuli Edelstein, a principios de este mes advirtió que 2.000 nuevos casos diarios de coronavirus sería como una forma de «línea roja», un umbral definido que de ser superado «podría conducir a un cierre general».

Lo cierto es que el Centro Nacional de Información y Conocimiento Coronavirus del gobierno comunicó que el miércoles se detectaron 2.032 casos positivos, lo que llevó la tasa de contagio a un preocupante 8.3%.

Las estadísticas revelaron que Israel registró 59 muertes por coronavirus y más de 12.000 nuevos casos en una semana, según datos del Ministerio de Salud publicados el viernes por la mañana, ya que el país cerrará negocios durante el fin de semana para detener la propagación del virus.

Con 13 nuevas muertes por COVID-19 en las últimas 24 horas, la cifra nacional de muertes desde el inicio de la pandemia aumentó a 446.

El ministerio confirmó 1.811 casos nuevos desde el jueves por la mañana, lo que eleva la cifra a 58.559 desde el inicio de la pandemia.

Sin embargo, el número de casos activos se redujo de más de 33.000 a 32.226, después de que entraron en vigencia nuevas reglas que establecen que los portadores de virus no necesitan esperar un resultado negativo de la prueba, pero pueden considerarse recuperados después de 13 días, si no muestran síntomas durante tres días consecutivos. El número de pacientes recuperados aumentó en 2.327 en 24 horas, lo que alcanza a 25.887.

El número de casos graves llegó a 302, un aumento de 89 durante la semana pasada. De los pacientes graves, 81 reciben asistencia respiratoria. Había otros 120 en condición moderada y el resto tenía síntomas leves o sin síntomas.

Por lo pronto, las nuevas medidas de protección de coronavirus del fin de semana entrarán en vigencia a partir de las 5:00 de la tarde. No se permitirá la apertura de tiendas, así como centros comerciales, excepto las tiendas esenciales como supermercados y farmacias.

Los gimnasios y salones de belleza también estarán cerrados. Sin embargo, los restaurantes permanecerán abiertos, al igual que los museos, zoológicos, atracciones turísticas, piscinas y playas, según lo dispuesto por el Comité de Coronavirus de la Knesset.