Agencia AJN.- Uno de los principales donantes estadounidenses del Foro Político Kohelet, un grupo de reflexión que ha encabezado gran parte de los esfuerzos en pro de la reforma judicial de la coalición, anunció que dejará de financiar el instituto, alegando las actuales desavenencias en la sociedad israelí.

Arthur Dantchik, cuya fortuna se estima en 7.500 millones de dólares y es considerado el principal apoyo financiero del grupo, confirmó la medida en una declaración al sitio de noticias Calcalist.

«A lo largo de mi vida, he apoyado a diversas organizaciones que promueven las libertades individuales y económicas de todas las personas. Sin embargo, cuando una sociedad se fragmenta peligrosamente, la gente debe unirse para preservar la democracia. Dejé de hacer donaciones a grupos de reflexión en Israel, incluido el Kohelet Policy Forum. Creo que lo más importante en estos momentos es que Israel se centre en la curación y la unidad nacional», declaró.

Kohelet dijo en un comunicado que recibe fondos de diversos donantes, pero no quiso hacer comentarios sobre el asunto concreto.

A lo largo de los años, Dantchik ha financiado una amplia gama de instituciones ideológicamente diversas, entre ellas el Instituto Shalom Hartman, un grupo de reflexión que promueve el pluralismo religioso y el debate civil sobre Israel dentro de la comunidad judía de Israel y Norteamérica.

El anuncio se produce más de una semana después de que la coalición aprobara una ley que despoja a los jueces de la capacidad de utilizar la denominada prueba de razonabilidad para revisar las decisiones y nombramientos del gobierno. La ley fue la primera parte del divisivo paquete legislativo del gobierno para revisar el poder judicial.

El secretario del Gabinete, Yossi Fuchs, declaró el miércoles que la coalición tiene previsto aprobar en la sesión parlamentaria de otoño la legislación destinada a someter los nombramientos judiciales al control absoluto del Gobierno -posiblemente el elemento de mayor alcance del paquete legislativo previsto- y después archivará el resto de su radical y divisivo paquete de reforma judicial.

Los investigadores de Kohelet han desempeñado un papel clave en la elaboración de muchas de las políticas del nuevo gobierno en materia judicial. El ministro de Justicia, Yariv Levin, ha citado a Aviad Bakshi, jefe del departamento jurídico de la institución, como uno de los académicos a los que consultó cuando elaboraba las trascendentales propuestas.

La ministra de Protección del Medio Ambiente, Idit Silman, ni siquiera pudo escapar del alcance de los activistas contrarios a la reforma cuando sobrevoló el Atlántico, donde una pasajera de su vuelo de Nueva York de regreso a Israel pegó carteles cerca de su asiento de avión en los que se leía «Apoyo al Estado de Derecho» y «Cuando las mujeres apoyan a las mujeres, ocurren cosas increíbles».

El personal de la aerolínea El Al pidió a la mujer que retirara los carteles, y no está claro si Silman los vio, informó el sitio de noticias Ynet.

Los carteles parecían ser una respuesta al anuncio hecho el martes por el ministro de que dos reservas naturales cercanas a Jerusalem permanecerán abiertas fuera del horario habitual de funcionamiento este mes para los visitantes que deseen bañarse en manantiales naturales sin miembros del género o sexo opuesto.

La Autoridad de Parques y Naturaleza de Israel (INPA), que depende del ministerio y gestiona los parques en cuestión, dijo que no cumpliría el plan hasta que lo aprobaran funcionarios del Ministerio de Justicia.

El plan, y las complicaciones que lo rodean, afectan tanto al reparto de recursos entre judíos religiosos y laicos como a la conformidad de burócratas y juristas con las políticas de los cargos electos, dos de las cuestiones más controvertidas que dividen a los israelíes en relación con la reforma.

De vuelta en Israel, los manifestantes se concentraron el viernes ante la bodega Tishbi, cerca de la ciudad costera de Zichron Yaakov, donde el ministro de Defensa, Yoav Gallant, cena semanalmente, recitando un cántico en el que se le acusaba de ser una marioneta.

Gallant trató de mediar en un compromiso entre la coalición y la oposición sobre la ley de «razonabilidad», pero fue aprobada sin ninguna suavización de última hora. El ministro votó a favor de la ley a pesar de advertir en repetidas ocasiones de los posibles perjuicios para la seguridad nacional, ya que miles de reservistas militares se comprometieron a no presentarse a sus obligaciones como voluntarios si se aprobaba la ley.

Los manifestantes también corearon cánticos ante la casa del ministro de Economía, Nir Barkat, en el barrio jerosolimitano de Beit HaKerem, se concentraron ante una cafetería de Rishon Lezion frecuentada por el MK del Likud, David Bitan, y se reunieron ante la casa del MK del Sionismo Religioso, Simcha Rothman, uno de los principales arquitectos de la reforma, en el asentamiento judío de Pnei Kedem.

Los organizadores de la protesta también planearon concentraciones ante la sede del partido gobernante, el Likud, a las 16.30 horas, ante la residencia privada del Primer Ministro Benjamin Netanyahu en Cesarea, a las 17.00 horas, y ante la visita del Presidente Isaac Herzog a Tel Aviv, a las 17.30 horas.