“AMIA es de Todos no es la lista de ningún rabino, sino que es de un equipo que está conformado por dirigentes y no por partidos políticos”, aseguró Sergio Brukman, uno de los candidatos que presenta la Lista 1 con miras a las elecciones que se realizarán el domingo en la mutual.
En diálogo con la Agencia Judía de Noticias (AJN), Brukman lamentó “algunas declaraciones de campaña” y opiniones contrarias a la participación de referentes religiosos en la política
“Nuestros rabinos, desde Moshe hasta Marshall Meyer, se bajaron del púlpito cuando tuvieron la necesidad. En este caso apoyan desde lo espiritual y lo ideológico”, afirmó.
La agrupación propone que “la AMIA sea de Todos, no una AMIA para todos. La mutual cumplió 114 años, es momento para pensar en una AMIA renovada, con nuevos aires, con un nuevo judaísmo que sea moderno” señaló Brukman, presidente de la escuela “Arlene Fern” y secretario de la Fundación Judaica.
“Aquí se están planteando dos modelos de AMIA posibles: el primero es aquel en el que algunos deciden por todos, y el que nosotros planteamos en un modelo en el que todos podamos convivir”, expresó, por su parte, Fabián Skornik, rabino de la comunidad Lamroth Hakol.
Brukman, en tanto, destacó como un hecho negativo la mala relación entre AMIA y DAIA, y aseguró que se le debe “devolver el rol protagónico a la Delegación”.
“La relación política a nivel institucional con el gobierno nacional debe volver a ser manejada esa institución. AMIA se tiene que dedicar a temas vinculados con la educación, asistencia social y cementerios. Ahí esta el tema donde nosotros queremos trabajar”, comentó
Tanto Brukman como Skornik fueron categóricos respecto de ese tema. “Tiene que haber cabida, dentro del cementerio de Tablada, para los conversos (por principios halájicos) del movimiento conservador que viven una vida comprometida con el judaísmo”, afirmaron.
“La propuesta de la conducción actual, que busca su reelección con (Abraham) Kaul, es hacer un cementerio no judío al lado de Tablada  y enterrar allí gente de forma no judía porque no reconoce su conversión; eso es inadmisible”, sentenciaron los dirigentes.
Y definieron: “Nosotros proponemos un terreno administrado por los conservadores y separado, como dice la halajá, por una línea de árboles”.
“Nuestra propuesta –siguió diciendo Skornik– es la de un rabinato conjunto. El objetivo es que el AMIA sea la mutual de todos los judíos y tenga en su parte religiosa la opción rabínica que más le satisfaga a cada uno. Si en la Argentina tenemos comunidades conservadoras y ortodoxas, eso debe ser reflejado en la AMIA; debe haber un rabinato conservador y uno ortodoxo”, aseguró el rabino.
Marina Degtiar, miembro fundadora de Familiares y Amigos de las víctimas del atentado a la AMIA e integrante de la agrupación, dijo “el equipo está consustanciado y comprometido con la causa” que investiga el atentado terrorista a la mutual.
“Se esta yendo (en referencia a la actual gestión) por un buen camino. AMIA coordinó acciones con los familiares y hay que seguir en ese sentido”, opinó Degtiar, aunque destacó que se debe “profundizar el reclamo por un esclarecimiento total del atentado, sobre todo respecto de la conexión local”.
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