El próximo lunes, 15 de septiembre, en la cena anual de la Fundación Memoria del Holocausto, representantes de la Legislatura de Buenos Aires declararán al evento como de "Interés cultural, histórico y educativo".
El proyecto de ley, escrito por el diputado del PRO, Jorge Garayalde, se aprobó ayer por unanimidad y quedó sellado hoy, cuando durante un almuerzo en la legislatura, se les informó la noticia a las autoridades de la institución.
"Para la sociedad toda, el museo es muy importante porque es muy didáctico en la idea del recuerdo. Es un gran aporte a la sociedad porque cuando uno lo visita invita a la reflexión", indicó a AJN el diputado Garayalde.
El legislador subrayó que “lo más importante es que esta no es una medida a favor del pueblo judío sino a favor de todos, porque estamos hablando de principios en el mundo como el de la tolerancia".
"Este museo nos insta a bajar el nivel de intolerancia y a terminar con el racismo y la demonización de personas a través de la propaganda subliminal. Yo no soy judío pero en mis visitas al museo entendí el mensaje y lo defiendo a rajatabla", expresó el diputado porteño.
Garayalde contó que piensa invitar a todos los legisladores a un recorrido guiado por el museo de la calle Montevideo 919.
En la reunión estuvieron presentes el presidente de AMIA, Guillermo Borger, y el secretario general de la mutual, Julio Schlosser; el titular de la DAIA, Aldo Donzis, el embajador de Israel en Buenos Aires, Rafael Eldad, el presidente del Museo, Mario Feferbaum, la directora Ejecutiva, Graciela Jinich, el representante de la Comisión Directiva, Manuel Kobryniec y el gran rabino de la comunidad Shlomó Ben Amú.
En declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN) Graciela Jinich dijo: "Esta declaración es para nosotros poder encontrar en la legislatura y la sociedad toda, el reconocimiento a la tarea que el museo desarrolla”.
“Es el aliento a seguir adelante entendiendo la necesidad de la existencia de este museo para una sociedad mejor", expresó la Directora Ejecutiva.
Jinich subrayó que “en esta declaración se junta la base de la misión del museo que es recordar, homenajear y trasmitir y se juntan el pasado, el presente y el futuro".
"Dado que el deber de la memoria es un mandato ético para las nuevas generaciones, debemos recordar el pasado y comprometernos en la noble tarea de transmitir las enseñanzas de la Shoá. En otras palabras, esta noble institución apuesta diariamente con su esfuerzo al valor de la educación como modo privilegiado de recuperar la historia para prevenir la reiteración de actos racistas y violentos que amenazan una y otra vez a la humanidad", cita un fragmento del proyecto de ley impulsado por Garayalde.
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