Agencia AJN.- El ministro israelí de Asuntos de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, acusó este martes al Vaticano de difundir ‘‘modernos libelos de sangre’’ contra Israel. Además, condenó a los gobiernos de Canadá y Australia por sus políticas que, según él, alentaron un aumento del antisemitismo a nivel mundial.

Durante su discurso en la Knesset (Parlamento israelí) para conmemorar la Semana de la Diáspora Judía, Chikli dirigió duras críticas al Papa Francisco, al primer ministro canadiense Justin Trudeau y al gobierno laborista de Australia: ‘‘Es profundamente descorazonador ver al Papa -líder de una institución que guardó silencio durante el Holocausto- promover ahora modernos libelos de sangre contra el Estado judío’’.

El ministro israelí hizo referencia a las declaraciones del Papa Francisco en las que aseguraba que los soldados israelíes atacan a los niños palestinos, calificando esta acusación como ‘‘mentiras sin fundamento en la realidad’’.

‘‘La afirmación de que Israel comete genocidio no solo es falsa: es un libelo de sangre de la peor calaña’’, expresó Chikli, que también condenó la participación del Papa en exhibiciones que retratan a Jesús como un nacionalista palestino envuelto en una keffiyeh.

En ese sentido, el ministro del Estado judío remarcó que ‘‘Jesús nació de madre judía, vivió como judío y murió como judío’’, subrayando que la representación borra la verdad histórica y advirtiendo que ‘‘esta distorsión de la historia no sólo es ofensiva: es peligrosa y alimenta el antisemitismo’’.

Basándose en la historia cristiana y judía, Chikli recordó al Papa las raíces bíblicas de Jesús, vinculándolas a la identidad judía: ‘‘Jesús nació en Belén, la ciudad donde Raquel, nuestra matriarca, murió al dar a luz a Benjamín. Procedía del linaje del rey David, el betlehemita que se convirtió en rey de Israel, estableció Jerusalem como nuestra capital y cuyo hijo construyó el Templo’’.

Asimismo, el ministro destacó la conexión histórica entre el pueblo judío y Judea, señalando: ‘‘El propio término ‘judío’ proviene de Judá, el cuarto hijo de Lea. A lo largo de la historia, hubo intentos de borrar el vínculo entre el pueblo judío y la tierra de Judá, sobre todo por parte del emperador Adriano, que rebautizó Judea como ‘Siria Palestina’’’.

‘‘Fue doloroso ver a alguien de la talla del Papa participar en exhibiciones que sugieren que Jesús era un palestino partidario de la OLP. No se trata de un simple malentendido, sino de una traición a la verdad histórica y al liderazgo moral’’, agregó, mostrando su frustración por la aparente alineación del Vaticano con narrativas que socavan la historia y la soberanía judías.

Con respecto a Canadá y Australia, Chikli acusó a ambos gobiernos de permitir el antisemitismo a través de su retórica y sus políticas: ‘‘Las acciones de Justin Trudeau envían un peligroso mensaje al mundo’’, recordando que Trudeau fue el único líder del G7 que no visitó Israel tras la masacre de Hamás del 7 de octubre.

Australia, añadió el ministro israelí , se enfrenta a retos similares, tras el incendio provocado de una sinagoga en Melbourne y la quema de un auto robado en un barrio judío de Sídney: ‘‘El gobierno de Australia adoptó políticas antiisraelíes que hacen insegura la vida de las familias judías’’.

Chikli aseveró que ‘‘la era en la que los judíos guardaban silencio ante los libelos de sangre terminó. La era en la que los judíos permanecían impotentes mientras se derramaba su sangre terminó. Judea ya no está cautiva’’.

Para finalizar, elogió a países como Alemania y Estados Unidos por tomar medidas decisivas contra el antisemitismo, al prohibir lemas incendiarios como ‘‘Desde el río hasta el mar’’, y recortar la financiación a instituciones que toleran comportamientos antisemitas.

‘‘Es nuestro derecho y nuestra obligación moral luchar contra el mal del islamonazismo de Hamás. Am Israel Jai (el pueblo de Israel vive)’’, concluyó.