Los embajadores daneses, suecos y holandeses en Israel, así como funcionarios de las embajadas de Gran Bretaña, Bélgica, Italia, Hungría, Austria y Alemania, participaron en una reunión urgente con el departamento de la Knesset (Parlamento israelí) sobre Inmigración, Absorción y Asuntos de la Diáspora por la situación de las comunidades judías en Europa.

El legislador de Kadima Yisrael Hasson, un ex subdirector del servicio de seguridad interna Shin Bet, afirmó a los embajadores: "La OTAN bombardeó 5 mil civiles en Kosovo, sólo porque se sintió insultada, y 27 mil civiles iraquíes fueron bombardeadas durante la invasión de Estados Unidos debido a que representaban un peligro para Estados Unidos. No hay un país en el mundo que puede hablar con nosotros acerca de moralidad".

Hasson aseguró a los enviados extranjeros que "si los países europeos no protegen a los judíos en su territorio, lo hará el Estado de Israel. Sangre judía no es sangre barata".

Advirtió además: "Si no se colocan a nuestro lado, el día en que el terror islámico alcance sus casas, sus camas y sus jardines de infancia vendrá pronto".

El diputado Shimon Ohayon de Yisrael Beitenu se refirió a las protestas pro-palestinos en toda Europa, y resaltó que Israel está luchando contra "la guerra del mundo libre e iluminado en la oscuridad del Islam".

Por su parte, el diputado Avraham Michaeli de Shas señaló que una cuarta parte de los pacientes que están siendo tratados en el hospital de Safed, resultaron heridos en la guerra civil siria.

Los representantes de las comunidades judías en Europa, que llegaron a Israel con la ayuda del Congreso Judío de Israel, hablaron acerca de su sensación de inseguridad.