El ministro de Finanzas israelí, Ronnie Bar-On presentó un plan de estímulo económico de 22 billones de shekels al Parlamento, unos 5,5 billones de dólares.
"El plan de estímulo económico es vital para el mercado", informó Bar-On, quien pidió a sus oponentes políticos que superen sus desacuerdos y aprueben el plan de rescate en vistas a las próximas elecciones generales.
El plan incluye numerosos cambios en el mercado israelí y un aumento de la inversión gubernamental en infraestructura, transporte y construcción.
Se habilitarán nuevas líneas de transporte, se abrirán 500 aulas en 2009 y se aumentará el mantenimiento de calles y los fondos para el turismo.
Según Bar-On, el estímulo del tesoro se enfoca en expandir el empleo en Israel.
"De acuerdo a nuestros cálculos, el plan creará miles de nuevos trabajos para abogados, maestros, secretarias, trabajadores de la construcción, soldados y cerrajeros", señaló el ministro.
Bar-On dijo que espera que "los miembros del Parlamento demuestren un coraje político y apoyen el plan para acelerar el mercado".
"De otra forma, pagaremos un precio alto. Si no se toman decisiones encararemos el peligro de una severa recesión hasta que se forme un nuevo gobierno", informó a los periodistas en una conferencia de prensa en Jerusalem.
Además, el ministro llamó a los inversores en el mercado bursátil a que sean responsables y pidió a los empleadores a tomar trabajadores sólo si es completamente necesario.
Bar-on también dijo que trabajará para acelerar el plan de fortificación para las comunidades cerca de la Franja de Gaza.
JR-GB