Agencia AJN.- El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, advirtió al Estado judío que la negativa en los visados a los ucranianos que quieran entrar a Israel podría tener consecuencias en la peregrinación anual de los judíos ortodoxos a Uman, en la que decenas de miles de israelíes viajan para rezar en la tumba del rabino Nachman de Breslov.

En una declaración de su sesión informativa semanal a los ucranianos publicada en el sitio web oficial del gobierno, Zelensky expresó que escuchó «el informe de la Guardia de Fronteras, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Inteligencia en relación al tratamiento de nuestros ciudadanos – los inmigrantes que se encuentran en diferentes países, y en relación con los regímenes de visados. Las cosas a las que se enfrentan realmente los ciudadanos de Ucrania en la cuestión de los visados. A los responsables de estas cuestiones se les asignaron tareas adecuadas. Hay que garantizar los derechos de los ciudadanos ucranianos».

El embajador de Ucrania en Israel, Yevgen Korniychuk, aclaró la declaración, asegurando que iba dirigida a Israel.

«El gobierno de Ucrania no tolerará la humillación de sus ciudadanos al entrar en Israel. Pondremos fin a nuestros acuerdos bilaterales de exención de visados, tal y como estipula el artículo 7 del acuerdo intergubernamental. Esta opción está sobre la mesa de nuestro gobierno», advirtió Korniychuk.

El embajador ucraniano agregó que «es impensable que tengamos que desvivirnos por acoger a decenas de miles de israelíes en Umán, con un alto riesgo para la seguridad y con un enorme esfuerzo logístico, cuando, por otro lado, el gobierno israelí abusa de nuestros ciudadanos que vienen a Israel en el marco del tratado entre ambos países».

Korniychuk remarcó que si Israel desea que Ucrania siga permitiendo a los israelíes visitar Ucrania, incluido Umán, el primer ministro Netanyahu debería implicarse directamente en la resolución de la cuestión de los visados ucranianos.

Moshe Arbel contraataca a Korniychuk

Algunos miembros del gobierno israelí respondieron rápidamente a la afirmación del embajador ucraniano de que Israel estaba siendo abusivo con los ucranianos que intentaban entrar en el país.

Moshe Arbel, diputado israelí del partido Shas y actual ministro de Interior y Salud del país, denunció enérgicamente las declaraciones de Korniychuk.

«Rechazo completamente las afirmaciones sobre la humillación de los ciudadanos ucranianos al entrar en Israel. La política de inmigración israelí da la bienvenida a turistas de muchos países del mundo, incluida Ucrania. En casos en los que hay sospechas de uso ilegal de un visado de turista con fines de trabajo o asentamiento, la Autoridad de Población e Inmigración ejerce su autoridad legal», señaló Arbel.

Finalmente, el ministro israelí concluyó que »la audaz colaboración entre Israel y Ucrania continuará. Como ministro de Salud estoy orgulloso de la finalización del proceso de transferencia de medicamentos a Ucrania y de las colaboraciones en el campo de la salud mantenidas por mi oficina y tengo la intención de continuar y profundizar estas colaboraciones».