El gobierno de Egipto permitió que miles de palestinos cruzaran este miércoles la frontera desde Gaza para evitar el bloqueo impuesto días atrás por Israel

El presidente egipcio, Hosni Mubarak, dijo que tomó la decisión de permitir el acceso para que los manifestantes “pudieran comer y comprar alimentos”, pero con la condición de que luego regresaran a sus hogares.

La orden fue, según Mubarak, que los militares dispuestos en el puesto de Rafah "dejasen entrar” a los palestinos “mientras no llevasen armas”.

Israel, por medio de voceros oficiales, cuestionó la determinación egipcia al considerar que militantes de la organización Hamas pudieron traspasar por la frontera hacia el país y provocar actos de violencia.

En tanto, Ismail Haniyeh, referente político del movimiento islámico, se mostró dispuesto a reunirse con su rival en la región, el presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmoud Abbas, para analizar la situación de los habitantes que traspasaron la frontera egipcias.

Haniyeh reclamó, inclusive, una "reunión urgente" de la que, además de Abbas, deberían participar funcionarios del gobierno de Egipto.

"Estamos dispuestos a sentarnos con los hermanos egipcios y los hermanos de Ramalá (por Abbas) en una reunión urgente en El Cairo, para establecer soluciones sobre la apertura del puesto de paso de Rafah y de todos los otros puntos de paso" en  Gaza, dijo Haniyeh en un discurso.

Por su parte, cientos de personas fueron detenidas por las fuerzas de seguridad en El Cairo durante una manifestación convocada en favor de los palestinos de Gaza por la agrupación Hermanos Musulmanes frente a la sede de la Liga Árabe.