Agencia AJN.- La policía dio a conocer sus recomendaciones en la investigación de la causa 4000, también conocida como el caso Bezeq-Walla. El anuncio se hizo precisamente en el último día en el cargo del jefe de Policía, Roni Alsheij.

La policía y la Autoridad de Valores de Israel anunciaron que completaron la investigación sobre las presuntas acusaciones de soborno, fraude y abuso de confianza cometidos por el Primer Ministro y Shaul Alovitch, accionista mayoritario del grupo de comunicaciones Bezeq y el sitio de noticias Walla.

La principal sospecha es que el primer ministro aceptó sobornos y actuó en situación de conflicto de intereses interviniendo en decisiones regulatorias que favorecieron a Alovitch y al Grupo Bezeq, y al mismo tiempo exigió directa e indirectamente interferir con el contenido del sitio Walla de una manera que le beneficiara, tanto a él como a su familia.

La Policía indicó que la “base probatoria” muestra que, entre los años 2012 a 2017 el primer ministro y sus allegados o representantes intervinieron de manera flagrante y continua, y a veces incluso a diario, en el contenido publicado por el sitio web Walla News. También intentaron influir en el nombramiento de empleados del sitio (editores y reporteros) utilizando para ello sus vínculos con el matrimonio Shaul e Iris Alovitch.

Según la Policía, la intervención del primer ministro y sus allegados en los contenidos de Walla tenían como objetivo promover sus intereses personales mediante la publicación de artículos y fotos positivos y halagadores, eliminando el contenido crítico sobre el primer ministro y su familia. La Policía también sostiene que el matrimonio Alovitch utilizó esta situación para promover sus propios intereses, con decisiones regulatorias favorables a Alovitch y el grupo Bezek y para promover sus intereses comerciales.

Siempre de acuerdo con el informe de las recomendaciones policiales, contra el primer ministro Netanyahu se ha encontrado una base probatoria suficiente para procesarlo por los delitos de soborno, fraude y abuso de confianza, y recibir información fraudulenta bajo circunstancias agravantes.

Contra Sarah Netanyahu, delitos de soborno, fraude y abuso de confianza (en calidad de partícipe necesario), y obstrucción de la justicia.

El primer ministro Netanyahu difundió una declaración en la que manifiesta: «Las recomendaciones de la policía con respecto a mí y a mi esposa no son sorprendentes, ni el momento revelador de su publicación. Estas recomendaciones se decidieron y se filtraron antes de que comenzaran la investigación, y las recomendaciones de la policía no tienen ningún valor jurídico. Estoy seguro de que, también en este caso, las autoridades competentes, después de examinar el asunto, llegarán a la misma conclusión: que no hubo nada porque no hay nada «.