Agencia AJN.- Las autoridades de la Franja de Gaza ordenaron que se arrojen bloques gigantes de hormigón a lo largo de la costa, ante un mar en crecida que cada vez más se come las playas.

Los bloques, colocados en las playas y en alta mar, tienen como objetivo contrarrestar las olas que han crecido con fuerza, devorando los cimientos de algunos cafés y edificios junto al mar.

Pero los funcionarios, los residentes de las zonas de playa y los expertos temen que las barricadas de concreto no resistan otro invierno tormentoso y que las altas olas provoquen el colapso de la calle costera y amenacen las viviendas.

Nasser Thabit, funcionario del Ministerio de Obras Públicas y Vivienda del territorio, dirigido por Hamás, dijo que las olas alcanzaron los seis metros el año pasado a medida que los efectos del cambio climático se han vuelto más pronunciados.

“Hay varias áreas frágiles en la Franja de Gaza que se verían afectadas directamente por el aumento del nivel del mar. Existe el temor de que si las olas aumentan, podría causar una catástrofe y ahogar muchas de esas áreas residenciales”, advirtió.

Thabit dijo que una intervención adecuada a largo plazo (rompeolas verticales y muros de contención a lo largo de todas las partes de la costa o al menos en mayor riesgo) podría costar alrededor de 150 millones de dólares y pidió ayuda a los donantes internacionales.

Con una superficie de 375 kilómetros cuadrados, Gaza es una de las áreas más densamente pobladas del mundo, con una población de 2,3 millones de palestinos, la mayoría de ellos viven en campos de refugiados, algunos frente al océano.