Los máximos referentes del Instituto de Diálogo Interreligioso, el rabino Daniel Goldman, el sacerdote Guillermo Marcó y Omar Abboud, referente del Centro Islámico, dialogaron con la Agencia Judía de Noticias (AJN) sobre el significado del perdón en cada una de las religiones que profesan y las coincidencias valorativas que existen sobre él.
Según la tradición judía, que por estos días vive la fecha más importante de su calendario, Iom Kipur (Día del perdón), el perdón es un concepto fundante no sólo en la relación con Dios sino en aquella que se da entre semejantes.
"Tenemos dos tipos de perdón: el perdón para con aquellas cosas rituales y el perdón para con los seres humanos, que son dos categorías diferenciadas. Las acciones que hemos tenido erradas en relación a Dios, automáticamente, en el día de perdón, las perdona, las condona. Sin embargo, aquellos errores que hemos cometido para con nuestros semejantes, nosotros tenemos la obligación de ir y solicitar el perdón", expresó Goldman.
En una línea similar de razonamiento, el padre Marcó, ex Director de Prensa del Arzobispado, también hizo referencia al perdón "no sólo inherente a Dios sino como una facultad que el hombre tiene para otorgar".
"El razonamiento es: si Dios nos perdona, quiénes somos nosotros para no perdonar. Dios es bueno y su bondad ha llegado mucho mas allá y entonces nos invita a perdonar de la misma manera, en el grado más extremo esto es el perdón al enemigo, perdón que es bastante difícil de otorgar, que no es un perdón afectivo, porque uno no puede sentir ternura por las personas que a uno le han hecho mal, pero si es un perdón efectivo es decir, uno no debe procurar el mismo daño a una persona que a uno le ha hecho daño", analizó Marcó.
Por su parte, Omar Abboud, Secretario del Centro Islámico de la República Argentina, se refirió al perdón en el Islamismo como "un concepto ligado directamente con la divinidad, en el cual, la idea de perdonar y de aquello que se redime de lo pecaminoso tiene que ver con la súplica que le genera el hombre a Dios", explicó Abboud y agregó que "el perdón se hace efectivo sólo el día del juicio final y no antes".
Otro de los aspectos que estos tres religiosos se detuvieron a analizar es la dimensión del tiempo que, en cada calendario, establece diferentes momentos para redimir y ser redimido.
Según Goldman, debe reconocérsele a la tradición judía la capacidad de haber colocado dentro del calendario "un tiempo especifico para tener una acción interna de búsqueda" de los errores que se pudieron haber cometido.
"En realidad lo que tenemos que hacer durante todo el mes de Elul, que es el mes previo a Rosh Hashana, a los Iamim Noraim, que son los días fuertes, de arrepentimiento, de retorno, es revisar nuestro calendario personal, ser benévolos en el juicio para con el otro y ser duros en el juicio para con nosotros mismos", sostuvo el rabino.
Distintas son las costumbres para el Islamismo que no posee una fecha específica para "institucionalizar" el perdón porque, tal como lo explica Abboud, "En el Islam la cuestión del perdón es constante, es diaria y el creyente lo pide en cualquier momento".
Por su parte, Guillermo Marcó estableció como fecha específica para el perdón, la época de las Pascuas pero destacó la importancia que tiene la práctica de la Confesión "en la que uno se arrodilla frente un sacerdote y le cuenta las cosas que ha hecho y recibe de él la absolución, ofreciéndole la garantía de un perdón…más bien objetivo y sanador".
En estos días de recogimiento para el pueblo judío, las fechas unen y le otorgan un valor especial a las acciones cotidianas tan sencillas como equivocarse y pedir disculpas.
"Lo que nos une es la necesidad de las fechas, que son muy humanas, uno siempre recuerda a su madre o a su padre pero una fecha nos ayuda a valorar las cosas de un modo particular porque esta bueno que tengamos conciencia personal y también colectiva, todos tenemos la necesidad de otorgar un perdón pero también ser perdonados por algo, entonces ahí nos equipara a todos por igual reconociendo que uno también es deudor y no sólo aquél que otorga crédito", dijo el párroco.
Goldman, Marcó y Abboud son los principales referentes del diálogo interreligioso en la Argentina y, juntos, escribieron el libro "Todos bajo un mismo cielo", que reflexiona sobre la tolerancia, el respeto y la aceptación de las diferencias.
En diálogo con AJN enviaron un mensaje de confraternización para el desarrollo de un mundo más pluralista.
"Creo que la superación de los prejuicios son de aquellas cosas que imprimen en nosotros la posibilidad de hacer de esta sociedad, una sociedad distinta", enfatizó Goldman.
"Una de las mejores maneras de honrar cada una de nuestras celebraciones tiene que ver con dos cosas: Una es que podamos dialogar de manera interreligiosa. La otra tiene que ver con que cada uno sea capaz de asumir sus propios errores y no tenerle miedo al futuro en términos de la historia. La idea de diálogo, es casi lo único que le va a permitir al género tener una paz duradera", sostuvo Abboud.
"El odio es como una especie de cáncer que uno lleva en el corazón y que le impide vivir en paz. El tema del perdón tiene que ver con una sabiduría propia de lo religioso que también vuelca esa potencialidad de sanar las heridas interiores. Yo no perdono porque el otro se merezca el perdón sino que perdono porque a mi odiar me destruye, me genera infelicidad, falta de paz. Y por eso creo que es muy interesante el tema del perdón para poder vivir en paz", culminó el cura Guillermo Marcó.
SJS-BK-JR-LT-HJP