AJN.- Al menos un hombre del brazo armado del movimiento Hamás murió por el derrumbe de un túnel en el sur de la Franja de Gaza. Ya son 11 los muertos dentro de los túneles desde fin de enero y los hombres de Hamás comienzan a rebelarse e incumplir las órdenes de circular y trabajar en los pasadizos subterráneos. En Hamás acusan a Israel por los derrumbes.

La Brigada Ezzedin al Qassam, el brazo armado del movimiento Hamás, informó que Muhammad Musa al Astal, de 31 años de edad, murió en Khan Younis, “en un accidente mientras trabajaba en los preparativos para el próximo enfrentamiento con Israel”.

La prensa en Gaza citó a funcionarios de Hamás según los cuales hay cinco hombres desaparecidos. Éste es el séptimo túnel que colapsa en los últimos dos meses, con la muerte de 11 hombres y lesiones a decenas. En la organización Hamás están convencidos de que Israel está detrás del derrumbe de los túneles, por medio del equipo especial que fue colocado junto a la frontera para detectar los túneles.

En consecuencia, tras el colapso del túnel Khan Younis, sitios web palestinos difundieron fotografías de «medios tecnológicos avanzados para localizar túneles», y el sitio web de Hamás explica que “los sionistas tienen miedo de que los túneles lleguen hasta las poblaciones ubicadas junto a la valla de seguridad de la frontera”.

Cabe señalar que uno de los líderes de Hamás, Ismail Haniyeh, dijo que no uno de sus discursos que Israel opera para provocar el colapso de los túneles pero que, de todas maneras, la excavación continuará. La organización nunca admitió este hecho oficialmente. Esto se debe a que el derrumbe de cada túnel no sólo cobra víctimas, sino que baja la moral y desanima a los activistas de Hamás. Uno de ellos, citado por el diario Israel Hayom, aseguró que el entusiasmo de los hombres de Hamás en Gaza por entrar en los “túneles de la muerte” – como se los llama ahora – es prácticamente nulo en estos tiempos.

Según el activista citado por Israel Hayom, los líderes de Hamás son conscientes de la preocupación expresada por los activistas del ala militar de la organización, que están obligados a participar en la excavación de los túneles. «Los sionistas están nerviosos. Tienen miedo de que los túneles pasen por debajo de sus casas, y debido a esa presión están utilizando métodos muy avanzados para la detección y el colapso de los túneles».

El activista que dialogó con el diario israelí aseguró que hubo quienes se resistieron o se negaron a bajar a los túneles, “fueron juzgados y recibieron penas severas, por negarse a cooperar en el esfuerzo de Hamás. Se trata de una falta muy seria cuyo castigo es muy grave”.

Un familiar de un integrante del brazo armado de Hamás le dijo al diario Israel Hayom que, a pesar de las prevenciones de Hamás, “en la Franja se esparcieron los rumores sobre activistas que se niegan a bajar a los túneles”. Según este testigo, “ser enterrado en vida es una muerte horrible. En Gaza todos conocen las historias de miembros de la brigada que prefirieron castigos severos antes que excavar túneles. Los sionistas detectan los túneles y los derrumban, sin importar quién está adentro. Eso no es una muerte de mártir, es apostar la propia vida”.

 

R.L
4/3/16