Agencia AJN.- Los enfrentamientos se reanudaron por segunda noche en los diferentes barrios de Jerusalem el jueves.

Un joven judío de 17 años sufrió una herida en la cabeza en el barrio Sheikh Jarrah de Jerusalem el jueves por la noche después de que árabes le arrojaran piedras, informó KAN. La MDA informó que su estado era moderado y estaba consciente.

El joven resultó herido durante una celebración de Simjat Beit Hashoeva.

La MDA también informó que trató a otra persona que resultó levemente herida en el lanzamiento de piedras.

La Oficina de Portavoces del Ministerio de Defensa informó que disparos se escucharon en la noche del jueves cerca del cruce de Gilboa. Las fuerzas de seguridad del cruce están investigando. El cruce está cerrado al tráfico de vehículos.

Las FDI también dijeron que alborotadores abrieron fuego en un poblado en Binyamin, al noreste de Jerusalem.

Las fuerzas de seguridad israelíes se preparaban para más violencia el jueves después de que estallaron enfrentamientos en el este de Jerusalem y numerosas ciudades de la Margen Occidental, con cuatro compañías de reserva de la Policía Fronteriza llamadas a reforzar las fuerzas en el este de Jerusalem y las áreas circundantes.

La decisión de aumentar las tropas policiales se produce después de que los palestinos convocaran a un “Día de ira” el viernes.

Tras los disturbios de la noche del miércoles, el primer ministro Yair Lapid realizó varias evaluaciones de la situación de seguridad durante el día junto con el ministro de Seguridad Pública Omer Bar-Lev, el jefe de policía Kobi Shabtai, el jefe del Shin Bet (Agencia de Seguridad de Israel) Ronen Bar y otros funcionarios de seguridad.

Un comunicado de la oficina de Lapid dijo que “las fuerzas de seguridad están desplegadas en todo el país y están haciendo posibles todos los eventos festivos en Jerusalem y en general”.

Israel está «decidido» a permitir que continúen las celebraciones festivas por Sucot mientras actúa con «mano fuerte e intransigente contra el terror y los disturbios violentos».

Bar-Lev dijo que los disturbios en el este de Jerusalem “fueron muy graves”, pero la policía pudo controlarlos.

“No tenemos intención de permitir la ruptura del orden y la violencia, la policía trabajará contra quien sea necesario para mantener la paz, mientras continúa la búsqueda del terrorista que realizó el ataque a tiros del sábado”, dijo.

El ministro de Defensa, Benny Gantz, también realizó una evaluación de la situación luego de la violencia, con el jefe de Estado Mayor de las FDI, el teniente general Aviv Kohavi, el coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios Gral. Ghassan Alian, Shabtai, Bar y otros.

Tras la reunión, Gantz enfatizó la necesidad de aumentar las acciones tanto ofensivas como defensivas, así como aumentar el esfuerzo para prevenir la incitación al terrorismo en las redes sociales.

Gantz también enfatizó “la importancia de una adecuada y mayor preparación de las fuerzas en general en los puntos de fricción, en parte sobre la base de las compañías de la Policía Fronteriza de reserva cuya movilización fue aprobada”, dijo su oficina.

Cuatro compañías de reserva serán movilizadas el viernes por la mañana, con dos desplegadas en el sector de Jerusalem y las otras en las áreas circundantes. Un total de 10 compañías de reserva de la Policía de Fronteras han sido puestas en alerta.

Las tropas de reserva se desplegarán junto con las fuerzas regulares, incluidas las compañías de la Policía de Fronteras, una brigada táctica, así como unidades encubiertas y militares.

Durante la noche del miércoles, palestinos arrojaron piedras, cócteles molotov y fuegos artificiales hacia las fuerzas de seguridad y prendieron fuego a neumáticos y contenedores de basura en los vecindarios del este de Jerusalem.

Los disturbios por el cierre del campo de refugiados de Shuafat luego del tiroteo mortal de la semana pasada fueron los enfrentamientos más violentos en el área en años. También estallaron enfrentamientos en Kalandia, al norte de Jerusalem.

Alborotadores palestinos también lanzaron cócteles molotov y piedras contra vehículos israelíes cerca de Kedumim, Hebron, Psagot y otros lugares.

Dos policías resultaron heridos en Isawiya, un barrio de Jerusalem, y 20 palestinos fueron arrestados durante los disturbios.

A pesar de la violencia, fieles judíos rezaron en la Tumba de José en Nablus, entrando y saliendo de la ciudad, que las FDI sellaron en respuesta a la escalada de violencia.