Agencia AJN.- Las fuerzas turcas lanzaron una ofensiva terrestre en el noreste de Siria horas después de que aviones de combate bombardearan la región fronteriza cuando Ankara finalmente inició un ataque en el territorio controlado por los kurdos.

En una declaración dada a conocer el miércoles, el Ministerio de Defensa de Turquía indicó que las tropas habían cruzado la frontera con Siria al este del río Eufrates.

El ataque por tierra se produjo horas después del bombardeo aéreo y de artillería, según el ejército turco se alcanzaron 181 «posiciones terroristas».

Al anunciar la operación el miércoles, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que el objetivo de Ankara era «evitar la creación de un corredor terrorista en nuestra frontera sur y llevar la paz a la zona».

Erdogan quiere expulsar a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) lideradas por los kurdos de la región fronteriza.

El SDF es el principal aliado de Estados Unidos en la lucha contra el Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), pero sus combatientes son vistos como «terroristas» por Turquía debido a los vínculos del grupo con el proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

Erdogan también quiere crear una llamada «zona segura», que se extienda a unos 30 kilómetros de profundidad en Siria, en la que algunos de los 3,6 millones de refugiados que viven actualmente en Turquía pueden ser reasentados.

Unos 14 mil rebeldes sirios que pertenecen al Ejército Sirio Libre viajaron desde el noroeste del país para ayudar a de Turquía, informó la agencia de noticias turca Demiroren (DHA).

Pero la acción militar de Ankara causó alarma entre las potencias mundiales, mientras que las agencias de ayuda advirtieron que la operación podría provocar una nueva crisis humanitaria y un mayor desplazamiento de personas en el área.

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cuya reciente decisión de retirar tropas del área liberó el área para la ofensiva de Turquía, calificó la operación como una «mala idea».

En medio de fuertes críticas en su país y en el extranjero por su decisión de retirada, Trump también amenazó con destruir la economía de Turquía, que ya estaba en dificultades, si sus fuerzas operan «fuera de los límites».