El Día Internacional del Holocausto representa una enorme oportunidad para mantener viva la memoria de la humanidad en relación con los crímenes del nazismo y contrarrestar la corriente de negación que pretende borrar o minimizar las crueldades de un régimen que llevó al exterminio de 6.000.000 de judíos.
Ese es el común denominador de las opiniones recogidas por la Agencia Judía de Noticias (AJN) entre las autoridades diplomáticas de Israel establecidas en Buenos Aires y de los líderes de la comunidad judía argentina.
El embajador israelí en Argentina, Rafael Eldad, señaló que “el tema de que haya un Día Internacional del Holocausto es muy importante, porque el deber de recordar y de cuidar la memoria no es solamente de las víctimas ni del pueblo judío, sino del mundo entero”.
“Estas palabras no están en el aire, sino que ahora que proliferan cada vez más las negaciones y las intenciones de borrar la memoria, esto se vuelve todavía más importante”, añadió el diplomático.
En Argentina, un país golpeado dos veces por el terrorismo sobre blancos judíos en la década de los 90, se han organizado distintos actos para recordar a las víctimas del Holocausto.
El gobierno argentino, junto a DAIA y organizaciones que integran el Grupo Argentino de Trabajo para la difusión del Holocausto, participarán el lunes de la ceremonia central de la efemérides, en el Salón de Actos del Banco de la Nación, en Buenos Aires.
El Día del Holocausto fue fijado por las Naciones Unidas el 27 de enero, porque en esa jornada de 1945 el ejército soviético liberó el campo de exterminio de Auschwitz, en Polonia.
En tanto, los presidentes de la AMIA, Luis Grynwald, y la DAIA, Aldo Donzis, coincidieron en que educar y mantener viva la memoria son las claves para que la humanidad enfrente a los “negadores contemporáneos” y para evitar que se repita un genocidio como el perpetrado por el nazismo.
Los dirigentes también destacaron el compromiso de Argentina con la recordación de la Shoá, porque es el único país latinoamericano que integra el Grupo de Trabajo para la Cooperación Internacional en Educación, Rememoración e Investigación del Holocausto (Task Force), compuesto por 24 naciones.
“Pareciera que la humanidad, a más de 60 años, no llegó a entender los riesgos del horror. Hoy seguimos escuchando a negadores contemporáneos que piensan que esto no existió”, manifestó Donzis.
Por su parte, Grynwald indicó que “la Shoá fue una tragedia del pueblo judío pero también de toda la humanidad”, para luego expresar que “por un lado hay que luchar para que no se repita nunca más y por otro se debe impedir esta especie de revisionismo histórico que niega el Holocausto”.
“Desde la AMIA se observa con preocupación y se condena cualquier negación del Holocausto. La máxima dirigencia iraní se empecina en sostener y promover la Shoá como un mito y minimiza sus consecuencias. Toda la sociedad debe luchar contra este tipo de formas de intolerancia”, sostuvo el presidente de la AMIA.
En este orden, Grynwald remarcó que “la educación es la clave para luchar contra este revisionismo, la xenofobia y el antisemitismo”, y dijo que para ello la institución que preside forma “parte activa como miembro” de la Task Force.
Donzis remarcó a su vez que el hecho de que Argentina forme parte de la Task Force “hace que el país entero esté comprometido con la recordación del Holocausto” y sostuvo que la DAIA tiene “la responsabilidad y el compromiso de transmitir estas enseñanzas para que nunca más vuelva a ocurrir un genocidio como este”.
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