La agrupación Familiares y Amigos de las Víctimas del atentado a la AMIA reiteró este jueves su pedido para que el juez Ariel Lijo ordene la declaración indagatoria del ex presidente Carlos Menem y de su ministro del Interior, Carlos Corach, acusados junto a otros funcionarios de cometer irregularidades en la investigación del ataque cometido en 1994 en Buenos Aires, que provocó 85 muertos.
“Queremos que en el juicio estén sentados Menem, Corach y todos aquellos que desde lo más alto del poder político corrupto de entonces hicieron posible que la investigación del atentado a la AMIA esté bajo un manto de corrupción, impunidad y encubrimiento”, expresó Sergio Burstein, integrante de la agrupación, en diálogo con la Agencia Judía de Noticias (AJN).
Burstein realizó estas declaraciones luego de que la Cámara del Crimen decidió mantener en su puesto al juez Lijo  hasta que se conozca el resultado de una pericia caligráfica sobre un croquis que figura en el expediente.
Familiares, junto con los representantes legales de AMIA y DAIA, había cuestionado al magistrado por las visitas que en su momento realizó la fallecida jueza María Luisa Riva Aramayo a la cárcel en la que se encontraba alojado Carlos Telleldín, quien fue el principal acusado del caso.
Lijo se desempeñó a principios de los años noventa como secretario de la magistrada, pero meses antes de cometerse el atentado dejó ese cargo.
Burstein explicó que la agrupación que integra pretende la “profilaxis” de la causa, y que iniciaron la querella para que la investigación “no tenga ni una mínima posibilidad” de que alguien la cuestione.
El familiar reiteró que el objetivo fue quitarle a los imputados una herramienta que “seguro iban a utilizar” en el juicio oral para invalidarlo, en referencia "a todas las cuestiones atenientes a las dudas planteadas (sobre Lijo) en cuanto a haber acompañado a Riva Aramayo" en sus visitas a Telleldín.
“Buscamos que la figura del juez sea intachable al simple efecto de no volver a vivir la frustración que ocurrió en el juicio anterior, donde las irregularidades cometidas en la investigación por quienes hoy están siendo acusados nos dejaron con las manos vacías", afirmó.
Burstein insistió en que Lijo se aboque “más que nunca” a investigar al ex presidente Menem, quien a su criterio fue “el máximo responsable de encubrir y no hacer nada para que el atentado no suceda”; lo mismo que el ex ministro del Interior, Carlos Corach, y el ex secretario de Seguridad, Andrés Antonietti.
Al mismo tiempo, Burstein resaltó la responsabilidad que les cabe en la investigación al ex juez Juan José Galeano, a sus fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia y al ex presidente de la DAIA, Rubén Beraja.
El familiar repitió que Lijo tiene “en sus manos” para pedir la indagatoria de Menem, Corach y Antonietti, con las mismas pruebas que sirvieron para elevar a juicio oral a todos los que hoy están implicados” en las irregularidades cometidas en la causa por la voladura de la mutual judía.
Por último, remarcó que los familiares sólo persiguen justicia, “sin intenciones ocultas”, y abogó por que “se siente en el banquillo de acusados a todos los responsables, se los juzgue y se los ponga en la cárcel, donde deberían estar hace muchos años”.
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