Agencia AJN.- Israel «actuó con determinación» durante el compromiso militar del sábado con Siria, destacó Avigdor Liberman.

«Parafraseando el conocido proverbio: Este no es el momento de ladrar, es tiempo de morder. Estamos siendo duramente mordidos, espero que no tengamos que hacerlo», añadió en una visita a la ciudad norteña de Kiryat Shmona.

El sábado, un avión teledirigido iraní despegó de la base aérea T4 de Siria en la provincia septentrional de Homs, Siria, voló a través del territorio jordano antes de que se infiltrara en Israel y estuviera durante aproximadamente un minuto y medio en el norte del valle del Jordán antes de ser alcanzado. En represalia por la incursión, ocho aviones israelíes despegaron para atacar el sitio de lanzamiento del dron. Durante la operación siria, alrededor de 20 misiles antiaéreos fueron disparados contra aviones israelíes, derribando a uno de ellos.

El gobierno sirio aseveró el martes que Israel enfrentará «más sorpresas» en futuros ataques contra territorio sirio.

«Tengan plena confianza de que el agresor se sorprenderá mucho porque pensó que esta guerra -esta guerra de desgaste a la que Siria estuvo expuesta durante años- la había hecho incapaz de enfrentar los ataques», aseguró el vicecanciller Ayman Sussan durante una conferencia de prensa en Damasco, capital de Siria.

«Si Dios quiere, verán más sorpresas cada vez que intenten atacar a Siria».

Los funcionarios israelíes advirtieron en repetidas ocasiones sobre el creciente afianzamiento de Irán en Siria. Tras la escalada en el norte, las FDI acusaron a Irán y la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de operar en la base T4 durante varios meses, respaldados por las fuerzas del ejército sirio y con la aprobación del régimen sirio.

En noviembre, Liberman solicitó un aumento de 4.800 millones de shekelim al presupuesto de las FDI, citando cambios de seguridad «significativos» que modificaron drásticamente la situación de seguridad de Israel, incluidas armas de precisión en manos de grupos como Hezbollah, así como la aceleración dramática de la industria militar y la presencia masiva de Rusia en Siria.

Israel y Rusia implementaron un sistema de mecanismo de desconfianza sobre Siria para evitar enfrentamientos accidentales entre los dos ejércitos. Según Liberman, el mecanismo de desconfianza con Rusia es «una conexión que se prueba a sí misma».

«Está claro que cada lado tiene sus propios intereses. Cada lado ve la imagen de manera diferente. En los años de guerra civil en Siria, pudimos evitar la fricción directa, eso es un logro en sí mismo», mencionó.

Kiryat Shmona, donde Liberman visitó el martes, se encuentra a unos cinco kilómetros al sur de la frontera libanesa con Israel.