Agencia AJN.- Un destacado miembro del poderoso Consejo Guardián de Irán le confirmó al medio The Associated Press que la República Islámica debe dejar de honrar todos los términos del acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales mientras siguen las tensiones con Estados Unidos.

Los comentarios de Abbas Ali Kadkhodaei muestran una creciente voluntad entre los intransigentes iraníes de utilizar el programa atómico del país para presionar a las potencias occidentales.

Los expertos en no proliferación ya están preocupados de que los pasos que Teherán tomó en los últimos meses en camino al año estimado para construir una bomba nuclear, si decide hacerlo.

Irán todavía permite a los inspectores de las Naciones Unidas monitorear sus sitios nucleares y no impulsó su enriquecimiento a niveles de grado de armas del 90 por ciento.

Abandonar completamente el acuerdo, como sugiere Kadkhodaei, podría llevar a una confrontación inmediata. Israel, que bombardeó Irak y Siria en el pasado para detener sus programas atómicos, advirtió que no permitirá que Irán construya un arma nuclear.

«Creo que quienes interrumpieron el juego deberían ser castigados ya que dañaron los intereses de otras partes», explicó Kadkhodaei en una entrevista con la AP en Teherán el sábado.

Kadkhodaei forma parte del Consejo Guardián de 12 miembros, un panel de seis clérigos designados por el Líder Supremo Ayatollah Ali Khamenei y seis juristas nominados por el poder judicial de Irán aprobado por su parlamento. El Consejo Guardián aprueba todos los candidatos parlamentarios y presidenciales y debe aceptar todas las leyes aprobadas por el parlamento antes de que se convierta en ley.

Eso le otorga al cuerpo, del que Kadkhodaei forma parte desde 2001, un gran poder político en el país. Nunca una mujer se postuló para presidente y bloqueó a todo candidato que busca cambios dramáticos en la República Islámica.

El Consejo Guardián en 2015 aprobó el acuerdo nuclear, que vio a Irán limitar su enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de las sanciones económicas. Los iraníes celebraron en las calles de Teherán, con la esperanza de que el acuerdo entre su presidente relativamente moderado Hassan Rouhani y el entonces presidente estadounidense Barack Obama significara que Irán podría normalizar las relaciones con Occidente después de décadas de enemistad.

Donald Trump se retiró del acuerdo en mayo de 2018, diciendo que no fue lo suficientemente lejos como para detener el desarrollo de armas nucleares y el programa de misiles balísticos de Irán.

Para Kadkhodaei, Irán no debería cumplir con sus compromisos en el acuerdo.

Imagen satelital de la instalación nuclear de Fordo en Irán. (Google Earth, 15 de septiembre de 2017)