La tregua acordada a partir de ayer entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza es una “muy buena” decisión, pero debe tenerse en cuenta que no tiene "sustento" si no va acompañada de otros pasos militares o políticos, señaló un ciudadano israelí en Buenos Aires a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
Moshe Rozen, vive en el kibutz Nir Itzjak, ubicado en el Negev, en la frontera entre Israel, Gaza y Egipto.
"Desde el punto de vista de los principios es una actitud sabia del gobierno el aprobar el trato porque nuestra gente está siendo muy golpeada por la ola de misiles, que atenta principalmente contra poblaciones civiles", expresó.
Al mismo tiempo, Rozen advirtió que, si el cese de fuego finaliza con éxito, Israel se encontrará "en el mismo punto de partida en el cual va a tener que resolver pasos políticos o militares, o probablemente una conjunción de ambos".
El cese de hostilidades, cuya duración está sujeta al levantamiento progresivo del bloqueo israelí a Gaza y a la finalización de los disparos contra las localidades sureñas del Estado hebreo, se mantiene desde el jueves a la mañana en un estado de tensa calma.
"Históricamente, el adversario aprovecha el tiempo para rearmarse", continuó Rozen, "esa es la trampa de la situación".
En este sentido, subrayó que hay que apoyar la medida pero a largo plazo hay que "fortalecer a los sectores moderados, constituyéndolos como único interlocutor palestino".
El israelí remarcó que se trata de una situación irregular, en la que una parte es un estado soberano con un ejército regular –Israel- y la otra es una "estructura política endeble, con escasas características democráticas y encabezada por un sector golpista, el (movimiento islámico) Hamas”.
Al respecto, hizo alusión a la fragmentación que sufren los palestinos desde que Hamas tomara el control sobre Gaza y desplazara la autoridad de Al Fatah, que gobierna Cisjordania mediante el mandato de Mahmoud Abbas.
Rozen sostuvo que la situación, "doblemente difícil" por la ausencia de democracia y la presencia de grupos fundamentalistas "adictos al terror", hace aún más complicado el diálogo.
Es por eso que consideró que debe ser el sector liderado por Abbas con quien se debe dialogar.
Mientras tanto, el vocero del premier Ehud Olmert, Mark Regev, afirmó que Israel respetará todos los compromisos tomados en virtud de los pactos logrados por Egipto, pero se mantendrá "con los ojos bien abiertos".
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