Agencia AJN.- Dos días después del fin de la operación León Ascendente y del alto el fuego entre Israel e Irán, el comandante de la Base Aérea de Hatzerim brindó detalles sobre los ataques aéreos llevados a cabo por la Fuerza Aérea de Israel (IAF) contra instalaciones estratégicas iraníes.

“Vimos con nuestros propios ojos las instalaciones nucleares bajo nosotros mientras las bombardeábamos”, aseguró el oficial en una entrevista con Kan Reshet Bet. “También identificamos los sitios de misiles tierra-tierra, así como el fuego y el humo que quedaban tras cada ataque”.

El comandante describió la sensación de los pilotos al despegar desde distintas bases y unirse en el aire como una combinación de “determinación y tensión”. “Escuchas las voces de tus compañeros mientras la escuadrilla se forma en el cielo, y sientes que nada puede detenerte”.

Durante la misión, se mantiene el silencio hasta salir del espacio aéreo iraní, como medida de precaución ante posibles amenazas. “A veces se intercambian algunas palabras en la cabina. El paisaje es impresionante, y en el regreso hay mucho tiempo para reflexionar”.

El vuelo de retorno también dejó impresiones personales. “Sobrevolamos Irak y Siria, países enemigos. Pasamos sobre Bagdad, cruzamos el Tigris y el Éufrates, y el navegador me dijo: ‘Desde aquí comenzó el viaje de Abraham’. Al pasar sobre Siria, bromeamos con la idea de detenernos a comer hummus en Damasco. Tal vez sea un anhelo de paz o de un Medio Oriente distinto, pero también una forma de liberar tensión”.

“El momento más impactante es cuando regresamos a Israel después de atravesar países tan extensos. Ver Haifa y Jerusalem desde el aire, como si fueran pequeños barrios en comparación, es algo impresionante”, concluyó el comandante.

Agencia AJN.- En su primer discurso televisado desde el inicio del alto el fuego que puso fin a la guerra de 12 días entre Irán e Israel, el líder supremo iraní, Ayatollah Ali Khamenei, declaró que la República Islámica logró una victoria y aseguró que su país “propinó una bofetada en la cara de Estados Unidos”.

Durante la transmisión, emitida por la televisión estatal iraní, Khamenei reapareció públicamente por primera vez desde el 19 de junio, visiblemente más fatigado. Afirmó que Estados Unidos solo intervino en el conflicto “porque temía que el régimen sionista fuera completamente destruido”.

Khamenei minimizó el impacto de los ataques estadounidenses a las instalaciones nucleares de Irán, calificándolos como “insignificantes” y dignos de una “acusación criminal ante cortes internacionales”. Acusó al presidente estadounidense Donald Trump de exagerar los resultados de la ofensiva para fines propagandísticos.

En su mensaje, reiteró que Irán no cederá ante las presiones internacionales: “Trump dijo que Irán debe rendirse. Esto es demasiado para él. La rendición nunca ocurrirá. Nuestra nación es poderosa”.

También advirtió que Irán es capaz de alcanzar bases militares estadounidenses y que futuras agresiones tendrían un costo elevado. Como parte de su retórica, calificó a la ofensiva iraní como una “victoria de la República Islámica” y mencionó el reciente ataque con misiles a una base estadounidense en Catar, el cual no dejó víctimas.

Khamenei, de 86 años, permaneció oculto en un lugar secreto desde el comienzo de la guerra, el 13 de junio, tras los ataques israelíes a instalaciones nucleares y figuras clave del aparato militar iraní.