Varios ministros del gobierno de Israel exhortaron este domingo a asesinar a Hassan Nasrallah un día después de que el secretario general del grupo terrorista Hizbollah declarase que su organización tiene "cabezas y partes del cuerpo" de soldados israelíes.

En la reunión de gabinete, el ministro del Interior, Meir Sheetrit, del partido gubernamental Kadima, aseguró que Nasrallah no debe ser "temido" sino "eliminado" y consideró que "cruzó todas las líneas” con su discurso del sábado.

El titular del recientemente incorporado Ministerio de Asuntos Religiosos, Yitzhak Cohen, del partido religioso Shas, subrayó a su vez que los dichos del jeque libanés "traen a la mente las declaraciones hechas por Hitler y otras personas similares".

Además, calificó al líder de Hezbollah como un hombre "lunático y cruel" y opinó que se lo debería haber "liquidado hace tiempo".

También el ministro de Vivienda, Zeev Boim, respondió a las palabras de uno de los hombres más buscados por Israel, quien en su primera aparición pública luego de más de un año afirmó que su grupo tiene restos de soldados israelíes muertos durante la Segunda Guerra del Líbano, librada entre julio y agosto de 2006.

Boim, de Kadima, se refirió a Nasrallah como una "rata de alcantarilla" y remarcó que "no debería ver jamás la luz del día".

Sin embargo, Ghaleb Majadle, ministro laborista de Ciencia, Deporte y Cultura, insistió en que "primero habría que analizar el discurso" para que Israel "no caiga en una trampa que sirva a su agenda".

Además, recomendó ser "sensibles" con las "valientes familias que perdieron a sus seres queridos en la guerra".

El Ejército, por su parte, denunció el sábado en un comunicado las "cínicas" declaraciones de Nasrallah y lo acusó de "vaciar de sentido los valores de todas las religiones, particularmente del Islam".

Fuentes de seguridad israelíes confirmaron al diario local Haaretz que los restos de los 119 soldados caídos en la guerra fueron inhumados en Israel, conforme a la tradición judía, "aunque Nasrallah pueda tener algunas pequeñas partes del cuerpo de algunos soldados".

En lo referente a las negociaciones con Hezbollah, fuentes gubernamentales y militares de alto rango indicaron que Israel "no negociará con la milicia libanesa para obtener los restos".

Israel se esforzará por conseguir la liberación de los soldados Ehud Goldwasser y Eldad Reguev, capturados mientras patrullaban en julio de 2006 la zona fronteriza, ya que se estima que Nasrallah no se refirió a ellos.

En enero de 2004, Israel y el grupo con sede en Líbano intercambiaron los restos de tres soldados israelíes y un empresario con vida por 36 prisioneros árabes -la mayoría libaneses- en Alemania, los cadáveres de 59 guerrilleros libaneses en la frontera con el Líbano y 400 palestinos en Cisjordania y Gaza.

ND-HDB