Agencia AJN.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pareció hoy reconocer públicamente por primera vez que el candidato demócrata Joe Biden ganó las presidenciales estadounidenses del 3 de noviembre, pero afirmó que las elecciones estaban «amañadas», al tiempo que insistió con su teoría de fraude electoral generalizado.

Sin embargo, más tarde pareció dar marcha atrás en un segundo tuit publicado el domingo.

Trump pareció reconocer la victoria de Biden en su primera publicación de Twitter en la que enumeró acusaciones de fraude sin fundamento. El mensaje fue rotulado por la red social con una advertencia que decía: «Esta afirmación sobre fraude electoral está en disputa».

«Ganó porque las elecciones fueron amañadas», escribió Trump en Twitter, sin referirse a Biden por su nombre.
«NO SE PERMITEN SUPERVISORES NI OBSERVADORES DE VOTO». Asimismo, el mandatario acusó a la compañía Dominion, “propiedad de la izquierda radical”, de suministrar “engañosos” equipos de recuento de votos con la complicidad de “los falsos y mudos medios de comunicación”.

La campaña de Trump ha presentado demandas que buscan anular los resultados en varios estados, aunque sin éxito, y los expertos legales dicen que el litigio tiene pocas posibilidades de alterar el resultado de las elecciones.

En un segundo tuit, el presidente afirmó que Biden «solo ganó a los ojos de los FAKE NEWS MEDIA» y agregó: «¡No concedo NADA!» Esa publicación también fue marcada por Twitter con una advertencia que decía: «Esta afirmación sobre fraude electoral está en disputa».

Los funcionarios electorales de ambos partidos han dicho que no hay evidencia de irregularidades importantes. Los demócratas y otros críticos han acusado a Trump de intentar deslegitimar la victoria de Biden y socavar la confianza pública en el proceso electoral estadounidense. Antes de las elecciones, Trump se había negado a comprometerse con una transferencia pacífica del poder.

La negativa de Trump a ceder no cambió el hecho de que Biden era el presidente electo, pero ha estancado el proceso normal del gobierno de prepararse para una nueva administración presidencial.

La decisión de la administración Trump de no reconocer a Biden como el ganador ha impedido que Biden y su equipo obtengan acceso al espacio de oficinas del gobierno y a los fondos que normalmente se otorgan a una administración entrante para garantizar una transición sin problemas.