Hoy se cumple el primer aniversario de la firma del polémico Memorándum de Entendimiento con Irán en el marco del atentado a la AMIA, que generó apoyó en el kirchnerismo y sus aliados, divergencias entre los familiares de las víctimas y un generalizado rechazo en la comunidad judía de la Argentina y el resto del mundo, el Estado de Israel y la oposición política local.



“Celebramos el cumpleaños de algo que no sirvió para que terminen casi veinte años de impunidad”, ironizó Sofía Guterman (al centro en la foto), mamá de Andrea y querellante independiente en la causa.



“Pasó un año y seguimos exactamente igual”, sintetizó Luis Czyzewski (a la izquierda en la foto), papá de Paola, quien está en la misma situación.



Ambos se escindieron del desaparecido Grupo de Familiares y Amigos de Víctimas, luego reconvertido en la Asociación 18J.



En este espacio, que apoyó el acuerdo desde el primer momento, “sabemos que Irán es impredecible, pero seguimos esperanzados porque sentimos que no hay alternativa para conocer si los acusados son o no responsables”, explicó Olga Degtiar (a la derecha en la foto), madre de Cristian.



“Leí una nota que decía que el canciller iraní (Mohamad Javad Zarif) estaba de acuerdo con el Memorándum y que antes de fin de año el fiscal (Alberto) Nisman podría interrogar” a los cinco imputados de ese país que tienen una orden de captura internacional avalada por la Interpol, agregó sin renunciar al optimismo. 



Czyzewski disiente por completo: “Para lo único que sirve este paso en falso es para darnos cuenta de que el querer negociar con Irán, que en definitiva nunca estuvo dispuesto a hacerlo ni a colaborar para saber la verdad, sino a ver cómo hace para zafar de las imputaciones fue un error estratégico, político y jurídico de nuestro país que hizo que pagáramos un precio mayúsculo al nivel de la consideración internacional en este tema y en otros que son más abarcadores que la propia investigación”.



“En su momento dije que si me equivocaba y eso representaba un avance, lo reconocería públicamente y retrocedería en todos mis dichos; cabía esa mínima esperanza, pero los hechos y el transcurso del tiempo nos demostraron que absolutamente nada cambió y los expertos y familiares teníamos razón”, analizó Guterman.



“Ojalá algún día podamos decir que estábamos equivocados y esto tomó un buen camino”, anheló.



Además, la mamá de Andrea recordó el veloz trámite que tuvo la iniciativa en el Congreso Nacional, donde fue aprobada en solo un mes y con el exclusivo apoyo de la mayoría automática integrada por el kirchnerismo y sus aliados.



“Me molestó muchísimo la forma rápida en que se convirtió en ley porque le dieron el aspecto de un juego más que de algo tan trágico como fue el atentado a la AMIA, con la cantidad de víctimas que arrojó”, se quejó.



Por su parte, desde Memoria Activa, que apoyó el Memorándum con reservas, declinaron hacer declaraciones ante la falta de novedades y aseveraron que ni bien el canciller Héctor Timerman informe acerca de algún avance, se manifestarán al respecto.

 

CGG