El embajador de Israel en Guatemala, Eliahu López, expresó su oposición a la resolución de las Naciones Unidas que otorgó a la Autoridad Palestina el estatus de Estado observador no miembro y advirtió que la medida es “un obstáculo para la paz” en Medio Oriente.

“Los palestinos debieron haberse sentado a una mesa con Israel para compartir esta tierra entre dos Estados y no esperar 65 años para tomar acciones que son un obstáculo para la paz y no les va a otorgar el Estado que piden”, sostuvo López en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN).

El diplomático realizó estas declaraciones al participar en un acto realizado en la ciudad La Antigua, donde el Gobierno de Israel otorgó un importante reconocimiento a Guatemala, país que fue uno de los principales impulsores de la creación del Estado judío, a través de una distinción entregada por el Keren Kayemet LeIsrael (KKL).

La actividad se realizó como parte del Congreso Anual de Líderes Judíos del KKL, que reúne a más de un centenar de dirigentes pertenecientes a 15 países de Latinoamérica.

“Guatemala ha tenido un rol muy importante en la resolución 181 de 1947, por la cual las Naciones Unidas decidieron otorgarnos un Estado y creo que merece que le demos las gracias, aunque hayan pasado 65 años”, expresó López tras la ceremonia realizada anoche en la que fueron homenajeados el ex presidente de Guatemala Juan José Arévalo, Carlos García Bauer, y el ex embajador de Guatemala en la ONU, Jorge García Granados.

En diálogo con esta agencia, el embajador resaltó que “la unidad judía es famosa en todo el mundo”, por eso se mostró confiado en “el apoyo de todas las comunidades y de la gente” que respaldó a Israel en 1947 para seguir adelante ante las amenazas que existen hoy en día: el terrorismo iraní y de Hamas”.

“Aún cuando muchas veces hemos tenido que defendernos de nuestros enemigos en estos 65 años, llegamos a éxitos que ningún otro país pudo alcanzar en desarrollo rural e integral, ciencias y estudios”, agregó el diplomático.

En el discurso dado durante la ceremonia de homenaje a quienes colaboraron en la creación del Estado de Israel, López recordó que su carrera diplomática la comenzó en Guatemala hace 35 años.

Luego se refirió a lo ocurrido hace a 65 años atrás con la Aprobación en la Organización de las Naciones Unidas de la Creación de un Estado Judío, que seis meses después se concretó con la Independencia de Israel.

“Yo tenía un año, pero mis familiares me contaron que en Israel todos salieron a la calle y bailaron con lágrimas de alegría y banderas, pero los países árabes rechazaron esta famosa resolución para que los judíos pudieran tener un pequeño pedazo de tierra donde vivir sin antisemitismo y empezaron una guerra total”, apuntó el embajador.

López señaló que había una gran expectativa entre los judíos de todo el mundo, que escuchaban la sesión de la ONU por radio y la votación, que duró 3 minutos.

“En su libro ‘Así nació Israel’, García Granados escribió que los judíos tenían derecho a tener su propio Estado. Luego fue el primer embajador de América Latina en Jerusalem y dedicó su tiempo a estrechar los lazos de amistad entre ambos países y con el resto de la región”, remarcó.

En este sentido, López subrayó que “los nombres de Jorge García Granados, Carlos García Bauer y Juan José Arévalo y los de los demás representantes de los países amigos quedarán grabados en nuestros corazones para siempre, como símbolo de apoyo a la paz y la justicia en Medio Oriente”.

Por su parte, Susan Michaeli, presidenta del Keren Kayemet LeIsrael en Guatemala, expresó que es “un orgullo especial” recordar y rendir tributo al rol “muy importante de tres guatemaltecos ilustres: el ex presidente de Guatemala Juan José Arévalo, Carlos García Bauer, y el embajador de Guatemala en la ONU, Jorge García Granados”.

Michaeli resaltó “la valentía que tuvieron estos grandes hombres en defender su convicción común a favor de la justicia”.

“Siento que todos aquí somos hermanos. Nos une un momento histórico de la humanidad y del pueblo judío. Durante 2000 años el pueblo judío soñó con regresar a su tierra, pasaron épocas difíciles donde ese sueño parecía inalcanzable. Finalmente en el siglo XIX se convino el primer congreso sionista. En esta ocasión Teodoro Herzl expresó públicamente lo que iba a decir el himno nacional de Israel: ser un pueblo libre en su propia tierra, la tierra de Sion y Jerusalem. Desde 1947, hace exactamente 65 años, en el seno de las Naciones Unidas gracias a las 33 naciones que ustedes representan el Estado de Israel se volvió realidad”, dijo la representante del KKL.

AJN