Agencia AJN.- La actividad económica en Israel sufre una fuerte contracción por los efectos del coronavirus y el Producto Bruto Interno (PBI) tuvo una caída interanual de 28,8% en el segundo trimestre, según informó hoy la Oficina Central de Estadística.

El organismo señaló que la recesión económica en el segundo trimestre se debió a la crisis generada por la pandemia y las medidas del gobierno para frenar la propagación del virus, que incluían limitar el número de trabajadores en el lugar de trabajo en abril a solo diez, o el 30% de todos los trabajadores, excepto en lugares de trabajo esenciales.

El cierre de los lugares de entretenimiento y esparcimiento y la salida y entrada de turistas se restringieron drásticamente, y solo durante el mes de mayo comenzó el relevo, lo que provocó un retorno parcial a la rutina.

Según informó el diario Maariv en su sitio web, en el análisis de los datos del primer trimestre de 2020, que había cerrado en alza, en abril-junio hay una fuerte caída del 34,8% del PIB empresarial a precios básicos (excluidos los impuestos a los productos más las subvenciones).

Además, hubo una fuerte caída, del 44% en los gastos de consumo privado. Los datos también muestran que en el segundo trimestre hubo un descenso del 30,3% en las inversiones en activo fijo y un retroceso del 27,9% en las exportaciones de bienes y servicios. En contraste, hubo un aumento del 26% en el gasto público.

La segmentación de los datos muestra que en el segundo trimestre, el producto en las industrias de servicios financieros, seguros e inmobiliario disminuyó en un 45,4% anualizado.

El producto en la industria de comercio y hotelería y servicios alimenticios disminuyó en un 40,3% anual. Por otro lado, en las industrias de transporte, almacenamiento, correos y servicios de mensajería, hubo un salto del 53% anual, y en la manufactura, el aumento fue del 26,2% anual.

Las industrias de la información y las comunicaciones mantuvieron la estabilidad con un leve alza de 0,4% anual.

Además, las importaciones de bienes y servicios disminuyeron en el segundo trimestre en un 39,5% en forma anualizada, luego de una disminución del 18,6% en el trimestre anterior.

La Oficina de Estadísticas señaló además que en el primer semestre de 2020, que solo se vio parcialmente afectado por la crisis del coronavirus que estalló en marzo, el PBI cayó un 10,1% sobre una base anualizada, en comparación con el semestre anterior, después de aumentar un 3,4% en el segundo semestre de 2019.

En tanto, el Servicio de Empleo anunció hoy que más de 260.000 personas se sumaron a la lista de desocupados desde el 17 de septiembre, un día antes del inicio de un bloqueo de una semana que comenzó a levantarse esta mañana.

Desde entonces, se han registrado 261.624 nuevos solicitantes de empleo en el Servicio de Empleo, de los cuales 228.122 fueron puestos en licencia sin sueldo.

Al día de hoy, 980.370 israelíes en total están desempleados, casi una cuarta parte de la fuerza laboral, que asciende a unos 4 millones, incluidos 628.344 que están en licencia.

Durante el primer brote del virus, en la primavera, las cifras de desempleo emitidas por el servicio se dispararon a más del 23 por ciento, ya que 800.000 personas perdieron rápidamente su trabajo en el cierre inicial de Israel.

A medida que disminuyó el brote, algunas personas pudieron regresar a trabajar, pero luego, con el aumento de las infecciones, el gobierno impuso nuevas restricciones y la tasa de desempleo se disparó nuevamente.