El ministro de Defensa de Israel, Moshe Ya’alon, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, acordaron suspender un controvertido programa piloto que, en su ejecución, hubiese evitado que palestinos que trabajan en el Estado Judío viajen a sus casas en micros israelíes en Cisjordania.

 

Bajo el edicto de la iniciativa de tres meses, a los palestinos no se les prohibió viajar en micros israelíes. Sin embargo había estipulado que cualquiera de ellos que viviera en Cisjordania o entrara a Israel a la mañana a través de pasajes en la barrera de seguridad debería volver a su hogar a través de esos mismos lugares, donde no hay líneas de micros israelíes.

 

El programa no hubiese afectado a todos los palestinos y estaba limitado a cuatro puntos de control en el centro del país. Actualmente, los palestinos que entran a Israel a través de allí toman micros israelíes para ir a sus hogares porque van por rutas más livianas.

 

El impacto de la medida, que habría separado a los palestinos y a los israelíes en un número de líneas de micros israelíes de Cisjordania, atrajo fuertes protestas de políticos del ala izquierda y activistas, informó el medio israelí The Jerusalem Post. “Así es como se ve el apartheid. No hay otra definición más educada que pueda sonar mejor. Separar las líneas de micros para palestinos y  judíos prueba que la democracia y la ocupación no pueden coexistir”, dijo el líder de Meretz, Zehava Gal-On, antes de que se tomara la decisión.

 

El Ministerio de Defensa había dicho en octubre que ejecutaría tal programa, pero no había tomado ninguna acción sobre el tema. Lo hizo luego de quejas del Consejo Regional de Samaria y sus líderes comunitarios locales, quienes argumentaran que los palestinos en los micros presentaban una amenaza de seguridad para los pasajeros.

 

Por su parte, el líder de la oposición, Isaac Herzog, quien encabeza el partido Unión Sionista, dijo que “la separación de palestinos e israelíes en las líneas de micro es una humillación innecesaria. También es una mancha en la cara del Estado de Israel y sus ciudadanos”.

 

JC