Matías Delfino es el diseñador gráfico argentino que hace cinco años trascendió a nivel mundial cuando una de sus obras fue elegida para representar una campaña de conmemoración del Holocausto. Hoy, a casi 66 años de la liberación del campo de concentración de Auschwitz-Birkenau (Polonia) por parte del ejército soviético, hecho elegido para conmemorar el Día Internacional de Recordación de la Shoá, Delfino aún se pregunta “cómo la comunidad internacional permitió un genocidio de tal magnitud”.
Desde Nueva York, donde reside desde hace más de un década cuando comenzó a trabajar en el Departamento de Diseño Gráfico de la ONU, Delfino confiesa que su interés por la temática de la Shoá comenzó desde joven.
“Durante la secundaria me asignaron hacer un trabajo de investigación sobre Ana Frank para lo cual me dirigí a la biblioteca de la AMIA, fue un par de años antes del atentado. Recuerdo como si fuera ayer lo mucho que me impactó la colección de imágenes que vi y desde entonces me costó comprender como la comunidad internacional miró para otro lado”, cuenta su primer contacto con la parte más triste de la historia mundial.
Delfino apunta que su primer vínculo con la Shoá fue justo dos años antes del atentado a la AMIA, el ataque terrorista más trágico que sufrió la Argentina, que se produjo en 1994 con un total de 85 muertos. “Fue como sentir la sombra del holocausto en mi propio país y en directo”, grafica.
A la hora de recordar cómo surgió la propuesta de elaborar un poster de recordación de las víctimas de Holocausto, Delfino relata que en ese momento se les encargó a todos los diseñadores del Departamento de Diseño que presentaran ideas para luego seleccionar una.
“Fue una especie de concurso creativo interno. La imagen viene siendo aplicada desde entonces en varios productos, entre ellos posters y sellos postales que se emitieron en forma conjunta entre la oficina postal de Naciones Unidas y el Correo de Israel”, cuenta.
La campaña realizada para condenar toda manifestación de intolerancia o violencia contra personas o comunidades basadas en su origen étnico o creencia religiosa fue simbolizada con el dibujo de un alambre de púa que se transforma en una flor.
¿Cómo repercutió este proyecto en tu vida? “Sin duda creo que esta campaña fue una de las que mayor satisfacción profesional me trajo. Una de mis frases preferidas dice: ‘El valor de tus ideas está en el impacto que causan en el mundo’. Y en el caso del poster y las estampillas conmemorativas del Holocausto sentí que lograron conmover y generar reflexión en la audiencia de una manera que nunca imaginé. Ojalá ayuden a generar conciencia para que un atentado contra la humanidad como lo fue el Holocausto jamás se repita”.
Este hombre que pasó gran parte de su vida en el barrio de Caballito, muy cerca del Parque Rivadavia aclara: “Más allá de no ser judío, siento que el Holocausto fue un atentado contra la humanidad en general, y creo que nos afecta a todos, judíos o no judíos”.
Cuando se lo consulta sobre la importancia que tiene una campaña publicitaria en un tema tan delicado como el Holocausto, Delfino apunta que “desde el punto de vista de la comunicación, estas campañas cumplen un rol vital como herramientas de información y concientización”.
“El tema del Holocausto es un tema fundamental, sobre todo en un contexto actual en el cual increíblemente aun existen personalidades que niegan su existencia”, resalta el joven argentino.
En el caso de la campaña realizada por la ONU, Delfino destaca que “en particular busca movilizar a la sociedad civil a recordar el Holocausto y a ayudar a prevenir actos de genocidio en el futuro”. “Muchas de estas iniciativas están dirigidas a instituciones educativas ya que la juventud es una de los audiencias claves sobre todo cuando pensamos en el futuro”, agrega.
– ¿Cuál es el mayor desafío cuando trabajas en una campaña como la Conmemoración del Holocausto? “El gran desafío nuestro como comunicadores desde Naciones Unidas es asegurarnos que nuestro mensaje genere un impacto en la audiencia, lo que presenta un desafío extra ya que nuestras campañas son destinadas a audiencias de diferentes culturas alrededor del mundo y no siempre es tan fácil encontrar una simple imagen que represente lo mismo para todas como en este caso”, explica.
Recibido en la Universidad de Buenos Aires, Delfino siempre estuvo vinculado a las campañas relacionadas con los Derechos Humanos, Paz y Seguridad, Cambio Climático, Desarrollo y Asuntos Humanitarios entre otros.
Delfino debe volver a sus tareas y la última pregunta tiene que ver con el antisemitismo.
“Todavía me cuesta entender como actos de intolerancia y discriminación de esta naturaleza siguen sucediendo en el mundo. A veces es difícil entender el pensamiento humano”, afirmó, por último, el diseñador argentino que quiere que nadie olvide lo que pasó durante el Holocausto.
GB